La computación bajo demanda, también conocida como cloud computing, se ha convertido en una prioridad para muchos líderes digitales. Según el analista Gartner, el gasto global en servicios de nube pública crecerá un 21,4% hasta 2018, alcanzando los $186,4 mil millones de dólares. Pero, ¿por qué cada vez más empresas están optando por esta estrategia? En este artículo, exploraremos las razones detrás de esta tendencia.
1. Experiencia en seguridad
Gideon Kay, CIO europeo de Dentsu Aegis Network, afirma que su empresa tiene la visión de convertirse en un negocio 100% digital para el año 2020. Esto implica crear y entregar servicios digitalmente a clientes que demandan este tipo de provisión. Kay sostiene que la nube jugará un papel clave en este enfoque. “Mi estrategia de adopción de la nube es que la nube sea la opción predeterminada: cualquier oportunidad que tengamos, cualquier software que estemos adquiriendo, ¿podemos obtenerlo como un servicio? ¿Puede ser basado en la nube y entregado a través de la nube? Si es así, lo haremos”, explica.
Kay señala que esta mentalidad de “nube primero” se aplica a aplicaciones, plataformas e infraestructura. Además, destaca la importancia de aprovechar la experiencia en seguridad de los proveedores de nube externos. “Ninguna otra organización comercial puede igualar lo que Amazon, Microsoft y Google pueden invertir en seguridad en torno a su infraestructura en la nube”, afirma. Sin embargo, reconoce que existen situaciones en las que no se puede utilizar la nube, ya sea por cuestiones de gobernanza de datos o por restricciones impuestas por los clientes. A pesar de esto, la opción predeterminada siempre será utilizar la nube, y se buscará utilizar múltiples proveedores para aprovechar sus fortalezas individuales.
2. Mejora del rendimiento
Chris Ashworth, CIO de Hermes, comenzó a migrar servicios a Amazon hace menos de un año y es un gran defensor de la computación bajo demanda. Según él, la nube es una elección obvia para las empresas. “En 10 años, habrá muy pocas compañías que tengan sus propios centros de datos, a menos que sean organizaciones gubernamentales o para algo extremadamente sensible”, afirma.
La computación bajo demanda permite a las empresas aprovechar la infraestructura y los recursos de un proveedor de nube, lo que puede resultar en un mejor rendimiento y una mayor eficiencia. Al utilizar un único proveedor, las empresas pueden optimizar la integración y la gestión de sus servicios en la nube, lo que a su vez puede mejorar la experiencia del usuario y la productividad.
Conclusión
La computación bajo demanda se ha convertido en una estrategia cada vez más popular entre los líderes digitales. La posibilidad de aprovechar la experiencia en seguridad de los proveedores de nube externos y mejorar el rendimiento de los servicios son solo algunas de las razones detrás de esta tendencia. A medida que el gasto en servicios de nube pública continúa creciendo, es probable que más empresas adopten esta estrategia para mantenerse competitivas en la era digital.
