Hoy en día, los niños tienen acceso a la tecnología desde muy temprana edad, algo que era en gran medida imposible para las generaciones pasadas. Dado que la investigación muestra que la tecnología digital afecta nuestro cerebro y que nuestro cerebro es más maleable cuando somos niños, los posibles peligros de la tecnología cuando es utilizada por los jóvenes es un tema candente.

Ahora, varios expertos en tecnología se están uniendo en un intento de proteger a los jóvenes de hoy de estos peligros. El grupo se llama Center for Humane Technology y entre sus filas se encuentran expertos en tecnología que trabajaron para Google y Facebook cuando las empresas estaban comenzando. “Estábamos en el interior. Sabemos lo que las empresas miden. Sabemos cómo hablan y sabemos cómo funciona la ingeniería”, dijo Tristan Harris, ex ético interno de Google, quien encabeza el nuevo grupo, a CNBC.

El Center for Humane Technology está trabajando en estrecha colaboración con varios otros grupos, incluido el observatorio de medios sin fines de lucro Common Sense Media, para lanzar una campaña educativa llamada The Truth About Tech. La campaña adoptará un enfoque similar a los programas antitabaco dirigidos a los niños. El objetivo es crear conciencia entre los niños, los padres y los educadores sobre los peligros de la tecnología, especialmente la depresión y el comportamiento depresivo que podrían resultar de una exposición excesiva a las redes sociales. “Las supercomputadoras más grandes del mundo están dentro de dos empresas: Google y Facebook, ¿y hacia dónde las estamos apuntando?”, dijo Harris a CNBC. “Las estamos apuntando hacia los cerebros de las personas, hacia los niños”.

Common Sense Media y el Center for Humane Technology invertirán $7 millones para financiar la campaña de concienciación sobre los peligros de la tecnología, mientras que los socios de medios, incluidos Comcast y DirecTV, donarán $50 millones en forma de tiempo de transmisión.

Un grado de hipocresía

Aunque las intenciones de los miembros del Center for Humane Technology son bastante nobles, hay algo irónico en todo el movimiento: sin los esfuerzos de estos primeros innovadores, es probable que el estado de la tecnología y las redes sociales fuera muy diferente. Roger McNamee, miembro del Center for Humane Technology e inversor temprano en Facebook, reconoce el papel de la culpa en la formación del grupo, señalando que está horrorizado por lo que ayudó a crear.

Artículo basado en: Futurism