El Internet de las cosas (IoT) está revolucionando la forma en que interactuamos con la tecnología. Cada vez más empresas están adoptando esta tecnología y aprovechando su potencial y versatilidad. Según un informe de Vodafone, el 34% de las empresas en todo el mundo ya están utilizando IoT, y el 70% de ellas han superado la etapa de prueba.
A medida que la adopción de IoT continúa creciendo, es crucial construir confianza digital con los consumidores. Sin embargo, según una encuesta de PwC, solo el 39% de las empresas se sienten muy seguras de estar implementando controles suficientes de “confianza digital” en su adopción de IoT. Además, solo el 30% de las empresas planean invertir en seguridad de IoT este año.
Estos datos son preocupantes, ya que la seguridad y confiabilidad de los dispositivos IoT son fundamentales. Los consumidores confiarán cada vez más en estos dispositivos, como los automóviles conectados a Internet, que pueden afectar su seguridad física. Del mismo modo, los dispositivos médicos conectados también deben ser diseñados teniendo en cuenta la seguridad.
En un futuro cercano, las debilidades en la seguridad de IoT podrían tener consecuencias graves, como lesiones o incluso la muerte. Por lo tanto, es esencial que las empresas y los consumidores tengan la confianza necesaria en la seguridad y confiabilidad de estos dispositivos.
La confianza digital no solo es importante para la seguridad física de los usuarios, sino también para la protección de sus datos personales. Los dispositivos IoT recopilan una gran cantidad de información sobre los usuarios, y es fundamental que esta información esté protegida de posibles ataques cibernéticos.
En resumen, el éxito de las empresas en el mundo de los dispositivos conectados depende de la confianza digital que puedan generar en los consumidores. Es necesario invertir en seguridad y confiabilidad de IoT para garantizar la protección de los usuarios y su información personal. El Internet de las cosas tiene un gran potencial, pero solo podrá alcanzar su máximo rendimiento si se construye sobre una base sólida de confianza digital.