Mi cuñada acaba de comprar un BMW Serie 3 y mientras observaba el automóvil (ya que no se me permite conducirlo), me di cuenta de lo increíble que es. Tiene muchas características de rendimiento, tecnología, eficiencia y diseño que, en conjunto, lo hacen altamente deseable. Y al parecer, no soy el único que piensa así, ya que el automóvil ha estado en la lista de los 10 mejores de Car & Driver durante 22 años consecutivos y se ha convertido en el estándar del “mejor sedán disponible en el mercado”. Sin embargo, al mirar hacia atrás en el BMW Serie 3 de 1979 (que casualmente es el año en que QAD comenzó), te sorprendería ver lo que falta. Características que ahora son estándar, como cuatro puertas, transmisión automática, ventanas eléctricas, aire acondicionado y más, no estaban disponibles. Obviamente, con el tiempo se han introducido características evolutivas bastante sustanciales. ¡Es sorprendente lo que las personas, el tiempo y la tecnología pueden lograr!
De manera similar al Serie 3, los sistemas ERP también han evolucionado drásticamente. Si rastreamos los inicios de los sistemas ERP, podríamos remontarnos a más de 50 años, tal vez incluso a los tiempos en que comenzaron a fabricarse productos a gran escala como parte de la revolución industrial. Pero, por brevedad, me centraré en la década de 1960 hasta hoy. En aquel entonces, cuando un fabricante recibía un pedido de un cliente para un producto, tenía que planificar cómo fabricarlo utilizando la planificación de requerimientos de materiales (MRP, por sus siglas en inglés). Si recuerdo mis días de estudio para mi certificación APICS CPIM, se podía calcular el MRP a mano, y solía hacerse, sin embargo, como muchos trabajos, las computadoras pronto se hicieron cargo debido a su eficiencia y falta de errores.
A medida que el MRP evolucionó en las décadas de 1970 y 1980, con las computadoras asumiendo cada vez más tareas pesadas, aún era solo un pequeño subconjunto del negocio, la producción, el que realmente se beneficiaba del sistema. El MRP luego evolucionó hacia la planificación de recursos de fabricación (MRP II), que incorporaba más datos de toda la fabricación y ahora podía responder preguntas del tipo “qué pasaría si”. Algunos llamaron al MRP II “MRP de bucle cerrado”. Observa que ya estamos bien entrados en la década de 1980 y aún no se ha mencionado el término y la solución de planificación de recursos empresariales (ERP, por sus siglas en inglés). No fue hasta principios de la década de 1990 que se mencionaron por primera vez los sistemas ERP. Con el ERP, ahora tenías la capacidad de ver datos y realizar funciones en toda la empresa. Con cada nueva característica y función, el software se volvió más robusto y las personas que lo utilizaban se volvieron más hábiles.
¿Qué es un ERP moderno? Eso nos lleva a hoy en día. Al igual que un Serie 3 moderno, un sistema ERP moderno promete impresionar con características, funciones y beneficios que conducen a experiencias de usuario positivas. A medida que las experiencias de usuario se orientan hacia aplicaciones más orientadas al consumidor, el ERP de hoy se ve muy diferente al ERP (o MRP o MRP II) de antaño. Un sistema ERP moderno no es algo trivial, pero debería permitir que individuos y organizaciones sean más efectivos, por eso tenemos la visión de la Empresa Efectiva para todos nuestros clientes. Así que echa un vistazo al BMW Serie 3 de 1979 en comparación con la versión más actual. Si bien la versión de 1979 es un “clásico”, preferiría tener la versión actual para el uso diario. Cuando miras de 1979 a hoy, por supuesto que parece un gran salto. Pero si observas la evolución, no es tan drástica. Y si bien el diseño ha evolucionado, también hay muchas cosas “bajo el capó” que han cambiado (ahora tienes esas ventanas eléctricas que antes faltaban). Y lo mismo ocurre con los sistemas ERP: los cambios tanto en el diseño (interfaz de usuario) como en la tecnología subyacente han evolucionado drásticamente, lo que ha llevado a una evolución similar. Entonces, como con cualquier cosa grandiosa, siempre hay espacio para mejorar y evolucionar para mejor; ya sea un automóvil o tu sistema ERP. Y afortunadamente, sé dónde obtener un sistema ERP moderno. Desafortunadamente, no sé cómo conseguir un BMW nuevo.
La evolución de QAD
QAD y nuestras soluciones han evolucionado considerablemente en las últimas tres décadas y media, pero lo que ha permanecido constante es nuestra dedicación a soluciones de clase mundial para fabricantes. Para obtener más información sobre las soluciones de ERP para fabricación de QAD, visita nuestro sitio web: www.qad.com/cloud
