En la era de la transformación digital, los robots y la inteligencia artificial están redefiniendo las reglas para la ejecución empresarial y la agilidad organizativa. La Automatización Inteligente (IA), una integración de RPA e Inteligencia Artificial, ha dado inicio a la cuarta revolución industrial o la segunda era de las máquinas, desafiando los modelos de negocio existentes y diseñando nuevos planos para la era industrial digital.
Con el avance de las tecnologías, a medida que el mercado de RPA madura, la RPA tradicional y otras tecnologías de automatización darán paso a la IA y al análisis para respaldar la automatización inteligente, integrando la gestión de casos, BPM, flujos de trabajo y creando suites de automatización inteligente que desempeñarán un papel clave en la transformación digital.
La transformación digital, hasta hace poco, se ha limitado en gran medida a las áreas de procesos repetitivos y relativamente simples que están impulsados por reglas. Sin embargo, cuando combinamos la inteligencia impulsada por datos y la gestión de casos con la automatización de procesos, todo el abanico de procesos que se pueden automatizar o gestionar de otra manera cambia. Este cambio en el proceso es impulsado por la Automatización Inteligente, que abarca ampliamente:
- Visión por computadora
- Procesamiento de lenguaje natural
- Autonomía
- Aprendizaje automático
En el núcleo de la IA, las decisiones se ponen en manos de la orquestación de estos dispositivos, aplicaciones y funcionalidades, permitiendo a las organizaciones lograr una verdadera automatización inteligente.
La Automatización Inteligente está madurando rápidamente a medida que los sistemas y los bots se vuelven inteligentes en el ámbito principal. También está atrayendo a nuevos inversores, ya que la inversión en nuevas tecnologías está impulsada principalmente por los objetivos de escalabilidad y agilidad organizativa. Las empresas priorizan las inversiones tecnológicas que pueden acelerar el tiempo de comercialización, empoderar a los trabajadores para tomar decisiones mejor informadas y reducir los costos asociados con la entrega de productos y servicios al mercado.
La convergencia de la tecnología y la ciencia cognitiva ofrece a las empresas nuevas herramientas poderosas para enfrentar nuevos obstáculos comerciales con mayor certeza. El verdadero desafío radica en comprender los sistemas heredados del negocio y el cambio hacia una empresa de automatización inteligente. Una organización inteligente está diseñada para comprender la conciencia situacional y las herramientas que necesita para adaptarse y analizar los datos dinámicos en un entorno operativo en tiempo real o casi en tiempo real.
La automatización de procesos redundantes es solo el primer paso que ha comenzado con la RPA. En el futuro, una organización inteligente diseñará estratégicamente la automatización para conectar sus sistemas interconectados y fuentes de datos, permitiendo a los usuarios responder o ajustarse rápidamente de manera proactiva a las diversas amenazas y oportunidades en el negocio. La conciencia situacional es el producto de este cambio y, para llevar la toma de decisiones más allá de la alta dirección, el personal de línea necesita información y datos para responder a los cambios del negocio.
La flexibilidad y la agilidad son otros componentes necesarios en el mundo dinámico para ajustarse y mitigar problemas con pérdidas operativas mínimas. La alta dirección necesita datos casi en tiempo real que les ofrezcan la posibilidad de evaluar el rendimiento en diferentes áreas de negocio. Se necesitan decisiones ágiles y basadas en la estrategia para anticipar los impactos en los eventos empresariales y evitar costosos errores.
La gobernanza cognitiva es el impulsor estratégico de la automatización inteligente al guiar multitud de resultados organizativos. La gobernanza cognitiva facilita el marco de adaptación a la automatización inteligente para la creación de inteligencia empresarial accionable que mejora las capacidades de toma de decisiones de una empresa, reduciendo así los procesos manuales que generan retrasos. En otras palabras, la gobernanza cognitiva reconoce metódicamente las brechas en toda la empresa y luego guía la automatización inteligente para reducirlas o eliminarlas.
La evolución de los procesos empresariales, a través de la combinación de análisis y automatización, se puede ver como la próxima era de la evolución, donde la fuerza laboral y las herramientas más inteligentes trabajan en conjunto. La combinación de automatización y capacidades organizativas permite que la fuerza laboral maneje volúmenes más grandes de datos para obtener mejores resultados.
Los mercados y las preferencias de los clientes están cambiando para mejor, y las empresas deben centrar sus esfuerzos en gestionar las expectativas crecientes a través de la automatización inteligente.
Artículo original: Analytics Insight