En el último episodio de nuestro podcast sobre IoT, Brian llamó a nuestra línea de voz para hacer una pregunta sobre la legislación “Build Back Better” recientemente aprobada en la Cámara de Representantes de los Estados Unidos. Hay una disposición en el proyecto de ley actual que requiere que los nuevos vehículos eviten la conducción bajo los efectos del alcohol. Específicamente, Brian quiere saber cómo se podría implementar esto. La respuesta corta es: aún no lo sabemos. Esto se debe a que el proyecto de ley actual no describe implementaciones específicas. Solo ofrece algunos plazos para encontrar soluciones e implementarlas. Esto es lo que sabemos después de leer la sección del proyecto de ley que se refiere a esto. Es la Sección 24220, por si quieres ver el texto original.
En primer lugar, entre dos y tres años después de la promulgación de la ley, el gobierno de los Estados Unidos creará un estándar federal de “tecnología avanzada de prevención de la conducción bajo los efectos del alcohol y la alteración”. Ese estándar se utilizará para dos propósitos: “monitorear de manera pasiva el rendimiento de un conductor de un vehículo de motor para identificar con precisión si ese conductor puede estar bajo los efectos del alcohol” y “prevenir o limitar la operación del vehículo si se detecta una alteración”. Por lo tanto, nada va a cambiar, al menos no por mandato, en ningún vehículo nuevo antes de eso. Básicamente, el gobierno estará trabajando en el estándar al menos hasta 2024 o 2025. Una vez que se apruebe el estándar, los fabricantes de vehículos tendrán dos o tres años adicionales para equipar sus autos con soluciones que cumplan con el estándar. Estas soluciones deben determinar “de manera pasiva y precisa” el nivel de alcohol en sangre de un conductor mientras conduce, y también evitar que el vehículo funcione si ese nivel está por encima del límite legal. Dado los plazos, lo más temprano que veremos soluciones obligatorias para este grave problema es en 2026. Sin embargo, sospecho que la fecha real será unos años después de eso. ¿Por qué? Aún no conocemos el estándar, por lo que es difícil diseñar soluciones reales. Claro, las empresas pueden, y probablemente lo harán, comenzar con anticipación utilizando varios dispositivos y servicios de IoT. Aun así, creo que veremos una adopción lenta por parte de los fabricantes de vehículos. Seguramente, algunos sensores formarán parte de la solución, aunque también podrían ser cámaras. Pero simplemente no conocemos los detalles aún. Estoy pensando que para cuando se implemente este esfuerzo, nuestros teléfonos móviles abrirán y encenderán la mayoría de los autos nuevos. Podría ser que no puedas encender tu auto si tu teléfono puede detectar que has bebido demasiado: hoy en día existen accesorios de alcoholímetro para teléfonos, aunque no llamaría a eso un monitoreo “pasivo”. También creo que se podrían aprovechar los sistemas de crucero automatizados en los vehículos actuales. Estos son los sistemas que utilizan cámaras externas para ver las líneas de la carretera y ajustar la dirección para mantenerse en el carril. Si un conductor no se mantiene en el carril porque está bajo los efectos del alcohol, debería ser fácil utilizar el mismo sistema para saberlo.
En resumen, aunque la legislación “Build Back Better” requiere que los nuevos vehículos prevengan la conducción bajo los efectos del alcohol, aún no se han establecido las implementaciones específicas. El gobierno de los Estados Unidos está trabajando en la creación de un estándar federal que permita monitorear de manera pasiva el rendimiento de los conductores y prevenir la operación de vehículos si se detecta una alteración. Sin embargo, no se espera que veamos soluciones obligatorias hasta al menos 2026. Aunque existen algunas ideas sobre cómo se podría implementar esta tecnología, como el uso de sensores o cámaras, aún no se ha definido el estándar final. Será interesante ver cómo evoluciona esta tecnología en los próximos años y cómo afectará a la seguridad vial.