La implementación de un sistema ERP (Enterprise Resource Planning) puede ser un proceso complicado y costoso para cualquier empresa. Sin embargo, es fundamental para mejorar la eficiencia y la productividad de los procesos empresariales. Desafortunadamente, muchas empresas han experimentado fracasos en la implementación de sus sistemas ERP, lo que ha llevado a problemas financieros y legales.

Un ejemplo reciente de esto es el caso de Revlon Cosmetics, que está enfrentando demandas colectivas de accionistas debido a su manejo deficiente en la planificación, monitoreo e implementación de su sistema ERP. La empresa no pudo cumplir con pedidos por un valor de 64 millones de dólares debido a su incapacidad para registrar y contabilizar el inventario. Esto ha llevado a que varias firmas de abogados presenten demandas colectivas en nombre de los accionistas de Revlon.

La demanda alega que Revlon no diseñó, implementó ni operó de manera consistente controles efectivos a nivel de procesos para garantizar el registro y la contabilización adecuada del inventario, las cuentas por cobrar, las ventas netas y el costo de los bienes vendidos. Este fracaso en la implementación del ERP ha tenido consecuencias graves para la empresa, como la incapacidad de enviar pedidos a los clientes, una caída del 7% en el precio de las acciones y demandas de los inversores.

Afortunadamente, este tipo de situaciones se pueden evitar si se siguen las mejores prácticas en la implementación de un ERP. A continuación, se presentan algunas recomendaciones clave:

Evaluación de la infraestructura tecnológica

Antes de implementar un sistema ERP, es importante evaluar la infraestructura tecnológica existente. Si es necesario, se debe considerar la posibilidad de actualizar o complementar la infraestructura para garantizar un funcionamiento óptimo del ERP. Esto incluye evaluar los requisitos de hardware, determinar los costos asociados y planificar la instalación adecuada. En algunos casos, puede ser más conveniente optar por un sistema ERP basado en la nube, donde el proveedor se encarga de gestionar y mantener el software y los datos asociados.

Planificación y toma de decisiones objetivas

La planificación adecuada es clave para el éxito de la implementación de un ERP. Es importante establecer metas claras, definir roles y responsabilidades, y asignar recursos adecuados. Además, es fundamental tomar decisiones objetivas basadas en análisis y evaluaciones exhaustivas. Esto implica considerar las necesidades y los requisitos específicos de la empresa, así como las capacidades del sistema ERP seleccionado.

En resumen, la implementación de un sistema ERP puede ser un proceso desafiante, pero siguiendo las mejores prácticas y tomando decisiones informadas, las empresas pueden evitar los fracasos que Revlon y otras compañías han experimentado. La evaluación de la infraestructura tecnológica y la planificación adecuada son elementos clave para garantizar el éxito en la implementación de un ERP.