La inteligencia artificial (IA) es una tecnología que ha revolucionado muchos aspectos de nuestras vidas, desde la forma en que interactuamos con nuestros dispositivos hasta cómo se toman decisiones en diversos campos. Sin embargo, también ha surgido una creciente preocupación sobre el potencial abuso de esta tecnología.
Microsoft, una de las empresas líderes en el desarrollo de IA, ha tomado medidas para abordar estas preocupaciones y garantizar un uso ético de su tecnología. Durante la Conferencia sobre Ética y IA de la Universidad Carnegie Mellon, Eric Horvitz, director de Microsoft Research Labs, presentó el compromiso de Microsoft con la ética en la IA.
Uno de los grupos clave que se enfoca en este tema en Microsoft es el Comité Aether, donde “Aether” significa IA y Ética en Ingeniería e Investigación. Horvitz explicó que este comité revisa cómo la tecnología de IA de Microsoft podría ser utilizada por sus clientes y hace recomendaciones que llegan hasta la alta dirección de la empresa.
Horvitz mencionó que se han tomado medidas significativas, como la suspensión de ventas a ciertos clientes, y se han establecido limitaciones específicas en el uso de la tecnología de IA, como la prohibición de utilizar el reconocimiento facial o la predicción de patrones basados en datos para ciertos fines.
Aunque no se dieron detalles específicos sobre qué clientes o aplicaciones se han visto afectados por las decisiones del Comité Aether, Horvitz hizo referencia a los compromisos de Microsoft con los derechos humanos. En los últimos años, la empresa ha proporcionado servicios basados en la nube, como el reconocimiento facial y el reconocimiento de emociones, a clientes gubernamentales e industriales.
La atención a los problemas éticos relacionados con la IA y el análisis de datos a gran escala ha aumentado tras los informes sobre la falta de salvaguardias de privacidad de datos por parte de Facebook. El CEO de esta compañía, Mark Zuckerberg, está programado para abordar esta controversia durante audiencias de alto perfil en el Congreso.
Entre las preocupaciones más importantes se encuentra la manipulación de votantes mediante aplicaciones de IA, así como la posibilidad de violaciones de derechos humanos, el aumento del riesgo de muerte o lesiones graves, y la negación de recursos y servicios. Para abordar estas preocupaciones, es posible que se requieran nuevos esquemas regulatorios.
Horvitz sugirió la posibilidad de contar con una entidad similar a Underwriters Laboratories o la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) para establecer mejores prácticas y regulaciones en el uso de la IA.
En resumen, Microsoft se ha comprometido a garantizar un uso ético de la inteligencia artificial. A través del Comité Aether, la empresa revisa y limita el uso de su tecnología de IA para evitar abusos y proteger los derechos humanos. Esta iniciativa es un paso importante hacia un futuro en el que la IA se utilice de manera responsable y ética.