En la era de la tecnología y la inteligencia artificial, los datos se han convertido en un recurso valioso para las empresas. Cada vez más organizaciones están invirtiendo en big data y AI para obtener insights y tomar decisiones informadas. Sin embargo, según una encuesta realizada por NewVantage Partners, las empresas están haciendo más avances en el ámbito tecnológico que en el humano.

La encuesta revela que menos de un tercio de las organizaciones encuestadas tienen una “cultura de datos” o una “organización basada en datos”. Esto significa que la mayoría de las empresas aún no han logrado integrar el uso de datos en su ADN empresarial. Aunque los líderes empresariales hablan de la importancia de los datos y la tecnología, sus acciones no reflejan esta afirmación.

La encuesta también revela que el mayor desafío para las organizaciones es la “adopción empresarial” de iniciativas de big data y AI. Aunque las empresas invierten grandes sumas de dinero en tecnología y desarrollo, los líderes de datos afirman que los insights y recomendaciones basados en datos no son aprovechados por los gerentes y empleados.

Entonces, ¿por qué las empresas están rezagadas en el lado humano de los datos? Según los resultados de la encuesta, el problema radica en las personas y, en menor medida, en los procesos. Aunque la tecnología está disponible, los gerentes y empleados no están aprovechando al máximo los insights y recomendaciones basados en datos.

Esto plantea la necesidad de un nuevo enfoque. Las empresas deben centrarse en desarrollar una cultura de datos y fomentar la adopción empresarial de iniciativas de big data y AI. Esto implica educar y capacitar a los empleados sobre la importancia de los datos y cómo utilizarlos para tomar decisiones informadas.

Además, las empresas deben asegurarse de que los procesos internos estén alineados con el uso de datos. Esto incluye la implementación de políticas de ciberseguridad y privacidad de datos, así como la promoción de la ética en el uso de datos.

En resumen, si las empresas desean aprovechar al máximo el potencial de los datos, deben prestar atención al lado humano de la ecuación. La tecnología es solo una parte de la solución; la verdadera transformación ocurre cuando las personas y los procesos se alinean con el uso de datos.