Según un informe de la firma de análisis Gartner, este será el año en que la tecnología del Internet de las Cosas (IoT, por sus siglas en inglés) se convierta en una herramienta común en el Reino Unido. La encuesta realizada por Gartner a finales de 2015 reveló que el 29% de las grandes empresas ya estaban utilizando productos basados en IoT y otro 14% planeaba implementarlos en los próximos 12 meses, lo que representa casi la mitad del mercado potencial. Además, dos de cada cinco empresas afirmaron que tenían la intención de adoptar esta tecnología después de 2016. Sin embargo, un 38% de las empresas no tienen planes de utilizar IoT en absoluto.

Las industrias con activos importantes, como servicios públicos, petróleo y gas, y manufactura, son las que más están adoptando IoT. Según Gartner, se estima que alrededor del 56% de las empresas en estas industrias habrán adoptado IoT para finales de este año, en comparación con poco más de un tercio en el sector de servicios. Hasta ahora, el enfoque ha sido principalmente en mejorar las operaciones internas y ahorrar dinero, pero se espera que haya un cambio hacia iniciativas centradas en el cliente en los próximos 12 meses.

El mayor desafío será demostrar el retorno de la inversión para justificar las implementaciones a gran escala. Aunque el crecimiento de IoT varía según el sector, Martin Garner, vicepresidente de la firma de investigación de mercado CCS Insight, cree que estamos presenciando el comienzo de algo muy importante. Él compara el impacto de IoT con el desarrollo del mercado de la electricidad a principios del siglo XX.

Es interesante destacar que muchas organizaciones, especialmente en el sector de consumo, no están adoptando el término “IoT”, sino más bien la idea de digitalizar el negocio. Diferentes aplicaciones están despegando a diferentes ritmos debido a los diferentes requisitos y niveles de conciencia en los diferentes mercados. El sector del transporte, que incluye la gestión de flotas y la telemática, es el más entusiasta debido a que ha encontrado fácil justificar el costo de la implementación de nuevas tecnologías.

La adopción en el mercado de servicios públicos se ha desacelerado debido a la alta inversión requerida en infraestructura, como medidores y redes inteligentes. En el sector de la salud, la monitorización remota de activos en hospitales es la opción más popular. Aunque se espera que las tasas de crecimiento aumenten, no se espera que el número de dispositivos conectados alcance los 50 mil millones para 2020, como se ha mencionado anteriormente. Esto se debe a que las organizaciones deben determinar cómo quieren utilizar la tecnología, probarla y luego implementarla a gran escala, lo que lleva tiempo.

A pesar de los desafíos, el Reino Unido ha visto un creciente interés en IoT por parte de los inversores de capital de riesgo durante el año pasado. Según Caroline Gorski, responsable de IoT en Digital Catapult, los inversores están buscando empresas disruptivas y que puedan cambiar el juego. A nivel de investigación, se han financiado alrededor de 135 proyectos con aproximadamente £120 millones en áreas como la salud, la seguridad y la privacidad, y la gestión inteligente de servicios públicos.

Aunque el mercado todavía enfrenta barreras importantes, como el alto riesgo, los altos costos y la falta de estándares y científicos de datos, se espera que el Internet de las Cosas tenga un impacto significativo en los negocios en los próximos años. A medida que más empresas adopten esta tecnología, se espera que se desarrollen nuevas aplicaciones y se encuentren soluciones a los desafíos actuales.