El Internet de las Cosas (IoT, por sus siglas en inglés) está revolucionando la forma en que funcionan las empresas de transporte y logística. Este concepto se refiere a la interconexión de objetos físicos a través de sensores y actuadores, los cuales están conectados a redes inalámbricas y al mismo protocolo de Internet (IP) que utilizamos para navegar en la web.
Estos objetos físicos, desde carreteras hasta camiones, generan grandes volúmenes de datos que son analizados por computadoras. Lo más sorprendente de todo esto es que estos sistemas de información físicos están comenzando a ser implementados y algunos de ellos incluso funcionan sin intervención humana.
Las aplicaciones del IoT en la logística se pueden clasificar en tres categorías principales:
- Tecnologías de seguimiento y rastreo: Estas aplicaciones se centran en el uso de sensores para monitorear la ubicación y el estado de los productos durante el transporte. Esto permite a las empresas tener un mayor control sobre sus operaciones y reducir los riesgos de pérdidas o robos.
- Optimización del consumo de combustible: El combustible representa aproximadamente el 40% de los costos operativos en la logística. Las empresas están utilizando datos de sensores de GPS y combustible para desarrollar algoritmos que optimicen los puntos de repostaje, detecten posibles robos y seleccionen las rutas más eficientes. Esto puede generar beneficios significativos para las empresas de logística, con un impacto positivo en sus resultados financieros.
- Plataformas tecnológicas: Una de las mayores oportunidades en la logística actualmente es aprovechar el IoT para crear una plataforma tecnológica que integre todo el ecosistema de camiones. Esto permitiría ofrecer servicios adicionales como seguros, reventa de vehículos y una plataforma ERP estandarizada para operadores de flotas medianas. Cada uno de estos servicios podría convertirse en una fuente de ingresos adicional para las empresas de logística.
El IoT está transformando la forma en que las empresas de transporte y logística operan, reduciendo costos, aumentando la eficiencia y creando nuevas oportunidades de ingresos. Sin embargo, es importante destacar que la implementación exitosa de estas tecnologías requiere un enfoque integral y cambios organizativos internos.
En resumen, el Internet de las Cosas está cambiando la forma en que se gestionan las operaciones logísticas. Las empresas que aprovechen estas tecnologías podrán obtener ventajas competitivas significativas en el mercado actual. El futuro de la logística está en la interconexión de objetos físicos y en la utilización inteligente de los datos generados por ellos.
