El fenómeno conocido como Internet de las Cosas (IoT, por sus siglas en inglés) ha revolucionado el mundo del comercio minorista y ha otorgado más poder al consumidor inteligente y siempre conectado. Los días de entrar a una tienda física para hacer una compra han quedado atrás; la inteligencia artificial ha redefinido los paradigmas fundamentales de las compras para el consumidor tecnológicamente consciente de hoy en día. La premisa principal de la revolución del IoT se basa en la automatización, donde los datos del consumidor se transmiten de manera fluida a través de una red conectada de sistemas, sin necesidad de intervención humana.
Los minoristas que han integrado el IoT en su estrategia de experiencia del cliente ya están comenzando a cosechar beneficios tangibles que van más allá de la lealtad a la marca y una mejora en los resultados financieros. El IoT está redefiniendo las tendencias de compra del consumidor. Las tecnologías habilitadas por el IoT, como los beacons y el seguimiento de Wi-Fi, han beneficiado en gran medida a los minoristas, que ahora pueden encontrar un equilibrio perfecto entre las tiendas físicas y las tiendas en línea cuando se trata de brindar experiencias superiores al cliente.
El IoT, en su forma básica, también ha impactado de manera significativa al consumidor promedio. Imagina una tienda de comestibles que envía instantáneamente a sus clientes recetas de comida seleccionadas en función de los artículos en sus carritos de compras; o un botón inteligente en la sala de lavandería de casa que automáticamente ordena un frasco de detergente fresco de una tienda en línea con opción de entrega a domicilio. ¿Qué tal una aplicación para teléfonos inteligentes que permite a los consumidores controlar los diversos electrodomésticos en sus hogares? Las posibilidades son infinitas.
Los consumidores se están volviendo más inteligentes cada día y dependen en gran medida de la tecnología IoT, como el escaneo de códigos de barras de productos en la tienda, para obtener información relevante sobre la disponibilidad de productos, descuentos, promociones, etc. Además, está la realidad virtual. Los sensores de la tienda que pueden leer dispositivos inteligentes y dispositivos portátiles desempeñan un papel importante en ayudar a los empleados de la tienda a ofrecer un servicio al cliente mejorado. Los dispositivos portátiles se están volviendo muy populares entre una población urbana en crecimiento y tecnologías revolucionarias como Google Glass, los rastreadores de fitness portátiles y los dispositivos de monitoreo de salud conectados a Internet han cambiado por completo la forma en que las personas llevan a cabo su vida diaria.
El Internet de las Cosas ha transformado la experiencia de compra del consumidor, brindando comodidad, personalización y una mayor interacción entre el consumidor y los minoristas. A medida que la tecnología continúa avanzando, es emocionante pensar en las futuras innovaciones que el IoT traerá al mundo del comercio minorista y cómo seguirá mejorando la vida de los consumidores.