Esta semana, en Davos, 3.000 líderes mundiales y empresarios asistieron a cientos de charlas, talleres, cenas y otros encuentros. La conclusión: la inteligencia artificial y el cambio climático nos van a arruinar, pero la tecnología blockchain y las mujeres nos van a salvar. Si bien los avances en inteligencia artificial son indudablemente significativos para la humanidad, el potencial de pérdida de empleos e inestabilidad a medida que las industrias se ajustan (o no) es enorme. “Al final del día, tenemos que despedir a mucha gente”, dijo Ursula Burns, presidenta del consejo de supervisión del grupo de telecomunicaciones VEON. La angustia de estas pérdidas incluso podría llevar a guerras, advirtió Jack Ma de Alibaba. “Cada revolución tecnológica ha desequilibrado el mundo”, dijo. Mientras tanto, gigantes tecnológicos como Facebook, aclamados como innovadores que cambian el mundo el año pasado, enfrentaron críticas directas y llamados a una regulación estricta en áreas como la privacidad de los datos y las noticias falsas. Incluso los ejecutivos tecnológicos, desde Marc Benioff de Salesforce hasta Dan Schulman de PayPal, se unieron al coro. Y luego están las amenazas existenciales, como el cambio climático y las pandemias. Cuando no se hablaba de las intenciones de Trump, las ambiciones de Macron o a qué fiesta asistir, los delegados quedaron atónitos por científicos con proyecciones medioambientales apocalípticas y simulaciones aterradoras de cómo se propagan los brotes en nuestro mundo cada vez más conectado.

Por otro lado, parecía que no había problema demasiado desafiante que no pudiera resolverse con la tecnología blockchain. Los CEOs de multinacionales hablaron sobre cómo los libros de contabilidad distribuidos podrían agilizar las cadenas de suministro y reducir los costos contables. La multitud más joven y ruidosa en los lugares alternativos temáticos de criptomonedas que surgieron en Davos por primera vez consideró aplicaciones para la extracción de minerales espaciales y el establecimiento de nada menos que una “nueva capa base de nuestra realidad”. Aunque ciertamente impulsado por la euforia de las criptomonedas, el debate sobre blockchain representó un tema de conversación genuinamente novedoso que atrajo a nuevas caras a un evento donde las mismas personas a menudo repiten sus discursos sobre los mismos temas año tras año.

En resumen, la inteligencia artificial y el cambio climático son dos temas que están en boca de todos en el Foro Económico Mundial de Davos. Mientras que la inteligencia artificial plantea desafíos en términos de pérdida de empleos y desequilibrios sociales, la tecnología blockchain se presenta como una solución para optimizar procesos y reducir costos. Por otro lado, el cambio climático y las pandemias representan amenazas existenciales que requieren una acción inmediata. En este contexto, es importante que las mujeres también jueguen un papel activo en la búsqueda de soluciones. En definitiva, el futuro de la humanidad depende de nuestra capacidad para enfrentar estos desafíos y encontrar soluciones innovadoras y sostenibles.