La inteligencia artificial (IA) está revolucionando el proceso de contratación, cambiando la forma en que las fuentes y agencias de reclutamiento detectan y contratan talento técnico. La IA y el aprendizaje automático permiten a los profesionales analizar rápidamente grandes cantidades de información y tomar decisiones y predicciones basadas en ella.
Hoy en día, las fuentes y los reclutadores están utilizando la IA para ayudar a identificar el “ajuste perfecto” de una oferta de trabajo, seleccionar candidatos más eficientes de los grupos de búsqueda y aumentar su capacidad para cubrir vacantes rápidamente.
La falta de publicaciones de empleo sin cubrir es un obstáculo importante para el crecimiento organizacional. Para asegurarse de que se están utilizando las herramientas de contratación adecuadas para completar una oferta de trabajo específica, algunas fuentes toman una pista del uso del análisis de supervivencia en el campo de la medicina.
En el ámbito de la salud, el análisis de supervivencia es un proceso de aprendizaje automático que analiza el tiempo para un evento, como el tiempo estimado de un paciente antes de que se repita una enfermedad o antes de su fallecimiento.
Algunos programadores y gerentes de contratación están utilizando la IA y el aprendizaje automático para “invertir la ingeniería” del “ajuste” de los candidatos y predecir su desempeño en el puesto. El mejor caso de uso es resolver el problema del “ajuste”, es decir, utilizar la tecnología para encontrar al mejor candidato para la empresa y viceversa.
La pregunta que todos intentan responder con entrevistas, evaluaciones, desafíos tecnológicos y de comunicación es: “¿Cómo puedo predecir el rendimiento de una persona?”. Por lo tanto, los reclutadores y gerentes de contratación más inteligentes pueden comenzar a recopilar currículums, evaluaciones de rendimiento, productos de trabajo, cualquier información sobre personas altamente exitosas que ya trabajan para ellos y alimentarla a un algoritmo para descubrir lo que necesitan.
Idealmente, cada empresa tendría la capacidad de crear algoritmos personalizados para satisfacer las necesidades únicas de su organización, considerando los diferentes métodos de éxito. Claramente, lo que hace que una persona sea un empleado destacado en una empresa no necesariamente se traducirá a otra empresa. Por lo tanto, es un poco como “Moneyball”, donde se buscan habilidades, características y experiencia específicas que puedan llenar las brechas existentes.
El problema es que muchas empresas están utilizando los parámetros equivocados, lo que no solo les perjudica en general, sino que también conduce a la falta de diversidad e inclusión. Sí, tal vez tengan títulos de Stanford, experiencia en Google, sean hombres blancos y hayan trabajado en varias empresas, pero al enfocarse únicamente en estas características, están excluyendo a cientos, incluso miles de personas que no cumplen con esos parámetros.
La IA y el aprendizaje automático también pueden ayudar a determinar cuándo y cómo los recursos y los reclutadores necesitan ayuda con su carga de trabajo, analizando quién tiene una cantidad desproporcionada de requisiciones de riesgo medio a alto que podrían requerir recursos o tiempo adicionales para cubrir.
En resumen, la IA está transformando la forma en que se lleva a cabo el proceso de contratación, permitiendo una selección más eficiente de candidatos y una mayor capacidad para cubrir vacantes rápidamente. Sin embargo, es importante utilizar la IA de manera responsable y considerar la diversidad e inclusión en el proceso de contratación.