La inteligencia artificial (IA) es una tecnología que ha despertado tanto entusiasmo como preocupación en la sociedad. Mientras algunos temen que la IA reemplace a los trabajadores humanos, otros creen que puede ser una oportunidad para mejorar la calidad de los empleos existentes y crear nuevos puestos de trabajo.
En una reciente conferencia de Oracle, el CEO Mark Hurd afirmó que la IA creará más empleos de los que destruirá. Uno de los sectores que podría beneficiarse de la IA es el servicio al cliente, que sufre de alta rotación en los centros de llamadas. Hurd señaló que la IA puede mejorar la seguridad, la satisfacción del cliente y la eficiencia empresarial en las aplicaciones de planificación de recursos empresariales (ERP).
Es importante destacar que Hurd reconoció que existen preocupaciones y temores en torno a la IA. Muchas personas tienen miedo de que la IA elimine empleos y eventualmente considere a los humanos como ineficientes. Sin embargo, Hurd argumenta que la IA en realidad creará más empleos, ya que puede permitir la reasignación de tareas tediosas a trabajos de mayor valor añadido.
Un ejemplo concreto de cómo la IA puede mejorar los procesos empresariales es la capacidad de categorizar automáticamente los recibos de viaje a partir de una fotografía. Mediante el aprendizaje automático, la IA puede extraer los costos relevantes y registrar los gastos de manera eficiente. Además, Oracle también anunció controles financieros avanzados que pueden automatizar auditorías y detectar anomalías mediante algoritmos de IA.
En resumen, la IA tiene el potencial de transformar la forma en que trabajamos y mejorar la eficiencia de las empresas. Si bien es comprensible que existan preocupaciones sobre su impacto en el empleo, es importante reconocer que la IA puede generar nuevas oportunidades laborales y mejorar la calidad de los empleos existentes. Como sociedad, debemos estar preparados para adaptarnos a estos cambios y aprovechar al máximo las ventajas que la IA puede ofrecer.