El Gobierno del Reino Unido está comenzando a respaldar sus comentarios sobre la inteligencia artificial (IA) al anunciar la creación de nuevos puestos de trabajo en dos departamentos. El Departamento de Digital, Cultura, Medios y Deporte (DCMS) y el Departamento de Negocios, Energía y Estrategia Industrial (BEIS) están estableciendo una Oficina Conjunta de Inteligencia Artificial, para la cual están reclutando personal.
Los dos departamentos están buscando un subdirector y un jefe de oficina para la IA, con un salario entre £65,000 y £80,000. Estos puestos están relacionados con el Presupuesto de 2017 y la Estrategia Industrial del gobierno, anunciados el 27 de noviembre. El Canciller Philip Hammond anunció una inversión de £500 millones en tecnología en el Presupuesto, mientras que la Estrategia Industrial se basa en el aprovechamiento de tecnologías avanzadas como la IA, el aprendizaje automático y el análisis de datos.
El gobierno también tiene la intención de nombrar a un presidente para un Centro Provisional de Ética e Innovación de Datos. El anuncio de trabajo dice: “Los algoritmos cada vez más sofisticados pueden obtener información poderosa, que puede ser utilizada de formas que influyan o incluso manipulen las decisiones que tomamos, o que dirijan los servicios y recursos que recibimos. Además, están surgiendo nuevos modelos económicos, con los datos en su núcleo, lo que plantea preguntas sobre cómo incentivamos y facilitamos el uso innovador, eficiente y justo de los datos. Nuestra tarea es aprovechar esta tecnología para el bien común: promover sus beneficios, apoyar la innovación y mitigar los riesgos para que funcione para todos. Es por eso que, en el Presupuesto de Otoño de 2017, el gobierno del Reino Unido anunció la creación de un nuevo Centro de Ética e Innovación de Datos. El centro asesorará sobre las medidas que necesitamos para permitir y respaldar la innovación segura, ética y revolucionaria en la IA y las tecnologías impulsadas por datos”.
La IA también tuvo un lugar central en el discurso de la primera ministra Theresa May en el Foro Económico Mundial de la semana pasada en Davos, Suiza. Según The Guardian, el discurso tuvo poca asistencia. Los delegados de la élite global esperaban un discurso sobre el Brexit.
Fuente del artículo: ComputerWeekly