En la era de la tecnología, la automatización se ha convertido en una herramienta poderosa que está transformando la forma en que trabajamos. La Automatización Inteligente (IA, por sus siglas en inglés) es una de las últimas innovaciones que está revolucionando el mundo laboral.
La IA tiene como objetivo automatizar procesos de principio a fin en computadoras y se encuentra en la intersección de la inteligencia artificial (IA), la automatización robótica de procesos (RPA, por sus siglas en inglés) y las plataformas de flujo de trabajo y nube. Algunos la han descrito como “hiperautomatización” o “automatización cognitiva”, términos que considero sinónimos.
Ahora, con una herramienta tan poderosa y revolucionaria como la IA, es tentador preguntarse cuánto trabajo de los humanos puede ser automatizado. ¿La respuesta? Lo justo y necesario, y no un minuto más. Después de todo, la IA trabaja en conjunto con los humanos para conectar personas, organizaciones y procesos. Está diseñada para las personas, por las personas y coloca a los humanos en el centro del nuevo futuro del trabajo, donde todos estamos liberados del trabajo laborioso que nos agobia para poder enfocarnos en el trabajo que nos brinda alegría.
Desglosé la anatomía de la nueva generación de IA en cuatro partes:
Visión
Actúa como los ojos de la nueva fuerza laboral automatizada. La visión por computadora permite casos de uso como el diagnóstico en línea automatizado de problemas médicos como quemaduras y enfermedades de la piel.
Ejecución
Actúa como las “manos y piernas” de la fuerza laboral automatizada. Esto incluye flujos de trabajo inteligentes y robots que respaldan las iniciativas de IA.
Lenguaje
Actúa como la “boca y los oídos” de la fuerza laboral automatizada. A través del procesamiento del lenguaje natural (NLP, por sus siglas en inglés), esta parte de la ecuación de IA ayuda a los robots de software a hablar y comprender conversaciones con colegas y clientes.
Pensamiento y aprendizaje
Impulsado por el aprendizaje automático, actúa como el “cerebro” de la nueva fuerza laboral automatizada para hacer posibles casos de uso tan poderosos como ayudar a los educadores a medir la atención de los estudiantes y ajustar las aulas al nivel de participación de las clases.
La IA está cambiando la forma en que trabajamos, liberándonos de tareas repetitivas y permitiéndonos enfocarnos en actividades más significativas. Sin embargo, es importante recordar que la IA no reemplaza a los humanos, sino que trabaja junto a nosotros para mejorar nuestra productividad y eficiencia.
En resumen, la Automatización Inteligente está abriendo nuevas posibilidades en el mundo laboral. Nos encontramos en un momento emocionante donde la tecnología y los humanos se unen para crear un futuro del trabajo más prometedor y gratificante.