El Internet de las Cosas (IoT, por sus siglas en inglés) ha revolucionado la forma en que interactuamos con la tecnología. Desde dispositivos inteligentes en nuestros hogares hasta aplicaciones en la industria, el IoT ha transformado la manera en que vivimos y trabajamos.
En la actualidad, el hardware utilizado en el IoT se ha vuelto más pequeño, más barato y más fácil de usar que nunca. Sin embargo, lo que está frenando su adopción masiva son las aplicaciones. Aunque podemos obtener sensores y placas a precios muy bajos, el costo de desarrollar los procesos, redes y utilizarlos sigue siendo inalcanzable para muchas empresas.
Las tendencias actuales del IoT revelan un mayor conocimiento del mercado de consumidores y empresas. Al utilizar procesos preconstruidos para reducir drásticamente la necesidad de crear aplicaciones desde cero, el IoT finalmente podrá abarcar a los sectores demográficos que hasta ahora había pasado por alto.
La clave para el futuro del IoT radica en la relación entre el desarrollo de hardware y software. En el pasado, hemos presenciado revoluciones tanto en el hardware como en el software. Los primeros ordenadores eran torres gigantes que alcanzaban velocidades asombrosas de 128KB/s. Luego, surgió una explosión de aplicaciones que llevó a estas máquinas al límite de su capacidad.
Cada ciertos años, nuevos avances en instituciones financieras, tecnología y leyes permiten que un lado lleve la innovación a niveles más altos y a precios más económicos, lo que a su vez impulsa a otros a seguir su ejemplo. La pregunta es cuándo y cómo sucederá esto en el caso del IoT.
En la actualidad, el IoT ha tenido un impacto significativo en el mercado empresarial. Los fabricantes han estado utilizando tecnología IoT para monitorear, controlar de forma remota y analizar sus maquinarias con el fin de reducir costos y ajustar su producción de manera proactiva. Los consumidores también están comenzando a disfrutar de los beneficios del IoT con productos como Nest y Fitbit, y estamos viendo el surgimiento de productos como botellas de medicamentos inteligentes y píldoras inteligentes.
El futuro del IoT es prometedor. A medida que el hardware y el software continúen evolucionando, veremos una mayor adopción del IoT en todos los aspectos de nuestra vida cotidiana. Desde hogares inteligentes hasta ciudades inteligentes, el IoT está cambiando la forma en que interactuamos con el mundo que nos rodea.