El Big Data ha sido una palabra de moda desde hace varios años, y cuenta con cifras sólidas que respaldan su importancia, incluyendo los $46 mil millones en ingresos generados en 2016 por proveedores de productos y servicios relacionados. Sin embargo, la era del Big Data apenas está comenzando a despuntar, y se espera un crecimiento aún mayor en los próximos años. Así lo sugiere un nuevo informe de SNS Research, que predice que para finales de 2020, las empresas gastarán más de $72 mil millones en hardware, software y servicios profesionales relacionados con el Big Data.
Si bien actualmente los ingresos están dominados por las ventas de hardware y los servicios profesionales, esto promete cambiar: para finales de 2020, los ingresos por software superarán las inversiones en hardware en más de $7 mil millones, según las predicciones del investigador. “A pesar de los desafíos relacionados con la privacidad y la resistencia organizativa, las inversiones en Big Data continúan ganando impulso en todo el mundo”, dijo la compañía en un resumen del informe, que se anunció el lunes.
Otros expertos también comparten el mismo sentimiento. “Más temprano que tarde, el Big Data se convertirá en un requisito básico para las empresas”, dijo Tony Baer, analista principal de Ovum. “No proporcionará una ventaja competitiva única a los innovadores, pero agregará una nueva base para el análisis y el soporte de decisiones que las empresas deben incorporar en sus procesos de toma de decisiones”.
De hecho, aún es temprano para este tipo de iniciativas, según Frank Scavo, presidente de Computer Economics. “La inteligencia empresarial y el almacenamiento de datos son las principales áreas de gasto tecnológico este año, pero solo alrededor de una cuarta parte de las organizaciones incluyen el Big Data en sus planes de inversión”, dijo Scavo, citando la investigación de su propia compañía. “Lo que estamos viendo hoy es solo la punta del iceberg”.
El informe de SNS Research y las opiniones de los expertos coinciden en que el Big Data continuará creciendo en importancia en los próximos años. A medida que las empresas se den cuenta de su potencial para obtener información valiosa y tomar decisiones más informadas, la inversión en hardware, software y servicios profesionales relacionados con el Big Data aumentará significativamente.
Si bien existen desafíos en términos de privacidad y resistencia organizativa, es evidente que el Big Data se está convirtiendo en una herramienta indispensable para las empresas que desean mantenerse competitivas en un mundo cada vez más digital. Aquellas organizaciones que no adopten el Big Data corren el riesgo de quedarse atrás y perder oportunidades clave para el crecimiento y la innovación.
En resumen, el futuro del Big Data es prometedor y está más allá de las tendencias actuales. A medida que las empresas continúen invirtiendo en esta tecnología y superen los desafíos asociados, podrán aprovechar al máximo el potencial del Big Data para impulsar su éxito y liderazgo en el mercado.