Los sistemas de planificación de recursos empresariales (ERP, por sus siglas en inglés) son una parte fundamental de la tecnología empresarial. Estos sistemas, muchos de los cuales provienen de empresas como Oracle y SAP, son el pegamento que une a las corporaciones. Los ERPs gestionan e integran sistemas vitales de registro en áreas como planificación, compras, ventas, finanzas y recursos humanos. Estos sistemas son enormes y complejos, considerados como los acorazados de la tecnología corporativa. Son tan importantes que muchos directores de información y tecnología los consideran sagrados. Después de todo, estos sistemas han requerido mucho esfuerzo, inversión y dedicación para su implementación a lo largo de los años. La actitud predominante es: “No te metas con mi ERP”.
Sin embargo, en la actualidad, cuando hablo con clientes sobre sus ERPs, percibo un cambio cultural debido al poder y las posibilidades de la tecnología en la nube. La nube es una ruta, no un destino. Utiliza los datos como un recurso natural para impulsar la ventaja competitiva. Para aprovechar los datos, los innovadores corporativos utilizan herramientas y procesos en la nube de su elección. Trabajan en las plataformas que desean y tienen la opción de adaptarse y pivotar. A nivel práctico, los innovadores buscan gestionar integraciones de datos y flujos de trabajo más complejos mediante la combinación de arquitecturas en la nube y en las instalaciones. Estos innovadores también desean solucionar los principales problemas de los ERPs: el alto costo de propiedad, la complejidad que dificulta la escalabilidad rápida, el desarrollo lento de aplicaciones y la escasez de habilidades especializadas.
Una de las mejores soluciones para el desafío de los ERPs es externalizarlos con una estrategia de servicios gestionados en la nube (CMS, por sus siglas en inglés). Con un servicio en la nube completamente gestionado, un proveedor de CMS puede construir y gestionar la infraestructura. También puede encargarse de los sistemas operativos, los parches, las copias de seguridad, el middleware y otras funciones. ¿Eres candidato para una solución de ERP gestionada en la nube? En mi experiencia, muchas organizaciones que trasladan sus sistemas ERP a la nube se encuentran en una o más de las siguientes situaciones: desean reducir los costos de su infraestructura, especialmente cuando es hora de reemplazar el hardware; están consolidando sistemas en la nube y desean aprovechar sus capacidades; necesitan un sistema ERP nuevo o renovado y no quieren invertir el capital para hacerlo en las instalaciones; no tienen las personas o habilidades para implementar y mantener la solución ERP más robusta.
Existen otras razones para aprovechar los ERPs en la nube. Es ideal para establecer nuevas ubicaciones o implementar rápidamente en nuevos mercados en el extranjero. Con un ERP en la nube, incluso podrías eliminar las oficinas tradicionales. También facilita la colaboración entre el personal interno, los socios y los clientes en diferentes ubicaciones geográficas.
Permíteme ser claro: trasladar un ERP a la nube no es simplemente cambiar un interruptor. Es un proceso complejo, especialmente la migración de datos. La integración de la nube con tu infraestructura en las instalaciones también puede ser un desafío. Debes considerar cuidadosamente el impacto de la nube no solo en tu entorno ERP, sino también en los empleados y los procesos comerciales.
En resumen, el futuro de los sistemas ERP está en la nube. La tecnología en la nube ofrece ventajas significativas en términos de costos, escalabilidad, desarrollo ágil de aplicaciones y acceso a habilidades especializadas. Sin embargo, es importante abordar la migración y la integración con precaución y planificación cuidadosa. Si estás considerando trasladar tu ERP a la nube, asegúrate de evaluar tus necesidades y objetivos comerciales, así como de contar con el apoyo de expertos en la materia.