El futuro de la inteligencia empresarial y el análisis de datos en la nube

La nube ha revolucionado la forma en que las empresas manejan sus datos y realizan análisis de negocio. Según un informe de Constellation, se estima que para el año 2020, al menos el 60% de los datos considerados críticos para las organizaciones estarán fuera de sus instalaciones físicas.

El cambio hacia la computación en la nube es el principal impulsor de esta tendencia y está cambiando la forma en que las organizaciones manejan la inteligencia empresarial (BI) y el análisis de datos. Sin embargo, no debemos cometer el error de pensar que las opciones de BI y análisis basados en la nube son solo para datos creados en la nube. Estos sistemas son ideales para el escenario cada vez más común en el que las organizaciones obtienen información de una multitud de fuentes.

En el año 2020, se espera una explosión de datos provenientes de diversas fuentes, como aplicaciones de software como servicio, redes de socios, redes sociales, aplicaciones móviles en infraestructura en la nube y fuentes de terceros, como datos meteorológicos, fuentes de enriquecimiento demográfico y conjuntos de datos gubernamentales.

La flexibilidad y la arquitectura de la nube ofrecen una oportunidad para aprovechar estas múltiples fuentes de datos y superar las barreras tradicionales de la inteligencia empresarial. No se trata solo de reducir costos iniciales y cargas administrativas, sino de aprovechar la flexibilidad y la elasticidad de la nube para acceder rápidamente a nuevas fuentes de datos a medida que surjan, sin importar dónde se encuentren.

Además, con los servicios en la nube, es más fácil incorporar información en las aplicaciones y compartirla con socios y clientes externos. Esto permite una mayor colaboración y una toma de decisiones más informada en toda la cadena de valor de una organización.

En resumen, el futuro de la inteligencia empresarial y el análisis de datos está en la nube. Las organizaciones que aprovechen las ventajas de la nube, como la flexibilidad y la capacidad de acceder a múltiples fuentes de datos, estarán mejor posicionadas para impulsar la innovación y adaptarse a un entorno empresarial en constante cambio.

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