El año es 2035 y los robots humanoides, impulsados por la Inteligencia Artificial, son parte de la vida normal. El detective Del Spooner odia a los robots desde que estuvo en un accidente automovilístico y un robot lo salvó mientras dejaba morir a una niña de 12 años, ya que las probabilidades de que ella sobreviviera eran estadísticamente más bajas que las del detective Spooner. Esa es una pequeña introducción sobre el protagonista de la película “Yo, Robot”, protagonizada por Will Smith. Finalmente, estos humanoides se unen en un plan para tomar el control del mundo. ¿Es ese el futuro de la Inteligencia Artificial (IA)? ¿Será que la máquina se vuelve tan poderosa que comienza a pensar en un lugar donde sea más eficiente que los humanos? Cabe destacar que dije eficiente, no poderosa. Sin duda, las computadoras son más eficientes al brindarnos respuestas más rápidas que el poder del cerebro humano, pero ¿son más competentes? Eso es lo que preocupa a la gente.

No, la IA no tomará el control del mundo. Películas como “Yo, Robot” son ciencia ficción, con un enfoque en la palabra ficción. Dicho esto, la IA es una herramienta empresarial muy poderosa que está respaldando a las empresas y sus estrategias de atención al cliente. Está creando una mejor experiencia para el cliente. Imagina que la computadora/robot de IA está escuchando la conversación del cliente en tiempo real. El cliente está haciendo una pregunta o planteando un problema. En primer lugar, la computadora le permite al representante de servicio al cliente conocer más sobre el historial del cliente: compras anteriores, razones por las que han solicitado ayuda anteriormente y mucho más. Al mismo tiempo, la computadora también puede ofrecer respuestas sugeridas al problema del cliente. Esto está sucediendo en tiempo real… y muy rápidamente.

La Inteligencia Artificial ha alcanzado su punto de inflexión y se ha abierto camino rápidamente en nuestra vida cotidiana, ya sea que lo reconozcamos o no. La IA está aquí para quedarse y lo que estamos presenciando es solo el comienzo. ¿Tomará la IA el control del mundo empresarial? Sin duda. ¿Sucederá de la manera en que lo muestran en las películas? Probablemente no. Sin embargo, lo que sí es cierto es que si bien la IA puede no cambiar realmente la interacción humana, puede, de hecho, trabajar en conjunto para ofrecer una mejor experiencia al cliente cuando se utiliza como la increíble herramienta que fue diseñada para ser.