En un evento reciente en el Museo de Ciencias de Londres, el ex CEO de Google, Eric Schmidt, expresó su preocupación por el liderazgo de Rusia y China en la carrera de la tecnología de inteligencia artificial. Durante una discusión sobre IA con el profesor Brian Cox, Schmidt respondió a una pregunta del público sobre las declaraciones de Vladimir Putin y el objetivo de China de liderar esta carrera para el año 2024.
Schmidt afirmó: “Estoy muy preocupado por esto. Creo que tanto los líderes rusos como los chinos han reconocido el valor de la inteligencia artificial, no solo para sus aspiraciones comerciales, sino también para sus aspiraciones militares”.
El ex CEO de Google también destacó la necesidad de que Estados Unidos y Europa obtengan más financiamiento para combatir este problema. Afirmó: “Es muy, muy importante que los increíbles motores que existen en Europa, Gran Bretaña, Estados Unidos, etc., obtengan más financiamiento para la investigación básica, la ética, y demás”.
Schmidt hizo hincapié en la importancia de mantener la tradición científica representada por el Museo de Ciencias y la historia del Reino Unido. Afirmó: “Estoy increíblemente en deuda con los últimos 150 años, al igual que todos ustedes, por los científicos británicos. Tenemos que tener más de ellos. Celebremos su trabajo. Atraigamos a más personas de otros países para hacer lo mismo. Superemos a Rusia y China con nuestra propia inteligencia, en lugar de cualquier otro resultado”.
Estas declaraciones se suman a las advertencias previas de Schmidt sobre cómo China superará a Estados Unidos en inteligencia artificial para el año 2025. Además, el ex CEO de Google criticó el rezago del gobierno de Donald Trump en comparación con el gobierno chino en el ámbito de la IA.
La carrera por el liderazgo en inteligencia artificial es cada vez más intensa. Rusia y China están invirtiendo grandes sumas de dinero en investigación y desarrollo de IA, reconociendo su potencial tanto en el ámbito comercial como en el militar. Sin embargo, Schmidt aboga por una estrategia diferente para Estados Unidos y Europa: en lugar de copiar los enfoques de sus competidores, deben aprovechar su propia tradición científica y su capacidad intelectual para superarlos.
Es fundamental que los gobiernos y las instituciones inviertan en investigación básica, ética y desarrollo de talento en el campo de la inteligencia artificial. Solo de esta manera podrán mantenerse competitivos en esta carrera y garantizar que los beneficios de la IA se utilicen de manera ética y responsable.
El futuro de la inteligencia artificial está en juego. ¿Quién liderará la carrera? Solo el tiempo lo dirá, pero es claro que la inversión en investigación y desarrollo, así como la promoción de la tradición científica, serán factores clave para determinar el resultado.