La tecnología es el futuro de nuestras vidas. A lo largo de los años, los avances en este campo han seguido transformando el mundo en el que vivimos, y no se detienen ahora. A diario, los desarrolladores trabajan incansablemente para crear nuevos software y algoritmos que transformarán la forma en que las personas se comunican, tratan a los pacientes, hacen negocios, combaten el crimen y, en general, existen. La inteligencia artificial (IA) está en el centro de este futuro tecnológico. Con la IA, algunos aspectos del mundo de fantasía proyectado en las películas de ciencia ficción pronto se convertirán en realidad.
Aunque es un fenómeno nuevo en el entorno general, la tecnología de IA se remonta a las primeras civilizaciones cuando los ingenieros egipcios y chinos inventaron autómatas. Los comienzos modernos de la IA se remontan a 1956, el año en que se estableció formalmente. Desde entonces, la IA ha pasado por varias fases de desarrollo. Actualmente, se refiere a máquinas con la capacidad de llevar a cabo actividades similares a las humanas, resolver problemas difíciles y mejorar el proceso de toma de decisiones. Esta tecnología también puede realizar funciones y tareas avanzadas que de otro modo serían abrumadoras para los humanos. La IA está destinada a mejorar radicalmente la recopilación y el análisis de datos, las operaciones comerciales, los procesos de fabricación, la política, las tareas domésticas y mucho más. Los efectos de la IA son de gran alcance y afectarán a todos los ámbitos humanos.
¿Qué es la IA? ¿Dónde estamos hoy y cómo será el futuro?
A pesar de los frecuentes informes y cobertura en los medios de comunicación y en línea sobre la tecnología de IA, muchas personas, especialmente en América, no tienen una comprensión clara de lo que es esta tecnología y las formas en que está revolucionando su mundo. Técnicamente, la inteligencia artificial (IA) es un amplio espectro de la informática que se ocupa de desarrollar máquinas inteligentes capaces de replicar y simular la inteligencia humana. En otras palabras, la IA es un término general para máquinas que pueden pensar, comportarse y realizar trabajos como los humanos, sin intervención o entrada humana. A veces, con mayor precisión, exactitud y eficacia, todos los dispositivos de IA operan utilizando diferentes niveles de tecnología de aprendizaje automático y profundo.
Hoy en día, la IA está a nuestro alrededor, está integrada en nuestra vida diaria, aunque muchas personas no son conscientes de ello. Piensa en Facebook, cómo esta plataforma conecta a todos desde cualquier lugar, facilita la comunicación en tiempo real y proporciona características y paquetes que satisfacen necesidades específicas de los consumidores. La aplicación de software de IA hace todo esto posible. A través de tecnologías de aprendizaje automático, Facebook recopila datos personales de sus usuarios, como patrones de comportamiento, gustos, estilo de vida e intereses, y los utiliza para obtener ganancias exorbitantes. La tecnología de IA también ha sido adoptada por empresas populares como Apple (Siri), Amazon (Alexa), Tesla (vehículos semiautomatizados), Nest, Pandora, Netflix y muchas más. Esta amplia aceptación también se refleja en el valor de mercado actual del software de IA. Un informe ha revelado que, en 2019, el mercado global de inteligencia artificial valía 28.42 mil millones de dólares estadounidenses y se proyecta que alcance los 40.27 mil millones de dólares estadounidenses en 2020. El mismo informe también postula que para 2023, el mercado de IA tendrá un valor de 99.98 mil millones de dólares estadounidenses con una tasa de crecimiento anual compuesta del 34.86%.
En resumen, la inteligencia artificial está cambiando rápidamente nuestro mundo y se espera que tenga un impacto significativo en todos los aspectos de nuestras vidas. Desde la forma en que nos comunicamos hasta cómo realizamos nuestras tareas diarias, la IA está transformando la sociedad y abriendo nuevas posibilidades. A medida que avanza la tecnología, es importante estar informado y preparado para aprovechar al máximo las ventajas que la IA puede ofrecer.