En los últimos años, el concepto de “la nube” ha evolucionado y se ha fragmentado. Ya no se puede definir la computación en la nube como simplemente “la nube”. Ahora, los servicios en la nube se pueden implementar de forma pública, privada o ambas. Uno de los modelos más recientes, la nube híbrida, combina servicios en la nube públicos y privados.
Según un informe de 451 Research, se estima que para el año 2019, el 69% de las empresas tendrán entornos de nube multi-nube o híbrida, lo que sugiere que la nube híbrida se está convirtiendo en lo normal. Los principales proveedores, como Red Hat, Google y Amazon Web Services, también están mejorando sus ofertas híbridas para adaptarse a un mundo cada vez más híbrido y competir mejor con otros jugadores ya establecidos en el mercado, como Microsoft Azure.
Recientemente, Google lanzó una versión beta de su modelo híbrido, Google Cloud Platform, lo que destaca la tendencia emergente de buscar un equilibrio entre la nube pública moderna y el modelo local. A primera vista, la nube híbrida puede parecer otro término de marketing. Además, la definición varía, lo que la hace aún más confusa. Sin embargo, vamos a profundizar en el tema, analizar el lenguaje de marketing y, con suerte, desentrañar el misterio de uno de los cambios más recientes en los servicios en la nube.
Entonces, ¿qué es exactamente la nube híbrida? El término puede resultar confuso porque fue acuñado por proveedores y vendedores. Además, los principales proveedores, como Amazon, Google y Microsoft, abordan la nube híbrida de manera diferente. En pocas palabras, la nube híbrida es una combinación de implementaciones de nube pública y privada, que operan como entidades separadas pero con la capacidad de gestionarlas como una sola. Sin embargo, la nube híbrida puede ser mucho más complicada que eso.
Existen múltiples formas de construir una nube híbrida, cada una con sus propias ventajas y desventajas. No vamos a detallarlas aquí porque podríamos hablar de ellas eternamente. La buena noticia es que los principales proveedores de Infraestructura como Servicio (IaaS) están facilitando la nube híbrida al extender su infraestructura pública para integrarse mejor con los servicios privados locales.
En resumen, la nube híbrida es una nueva forma de gestionar servicios en la nube que combina lo mejor de la nube pública y privada. A medida que más empresas adoptan este enfoque, es importante comprender sus beneficios y desafíos. En futuros artículos, exploraremos en detalle cómo construir una nube híbrida y cómo aprovechar al máximo esta nueva forma de gestionar servicios en la nube.