En la actualidad, muchas empresas de software empresarial o de planificación de recursos empresariales (ERP, por sus siglas en inglés) se encuentran en alguna fase de transición hacia una nueva plataforma digital, y cada una de ellas intenta persuadir a sus clientes de larga data para que hagan el cambio junto con ellos. SAP está buscando agresivamente trasladar su base a S/4 HANA, y Oracle está haciendo lo mismo con su oferta de ERP Cloud. Sin embargo, los clientes pueden encontrarse con que no se les ofrece una elección, sino más bien una demanda por parte del proveedor, ya que muchos gigantes del ERP están programando el fin del soporte para las versiones antiguas en la próxima década. ¿Te suena familiar? Es un cambio importante que no es nuevo: aquellos que estuvieron en el mundo empresarial durante finales de la década de 1990 recordarán la prisa por actualizar los sistemas antes del temido escenario del Y2K, así como el cambio de sistemas antiguos de “pantalla verde” a sistemas cliente-servidor y basados en la web. La transición actual hacia plataformas digitales de próxima generación es similar a aquellos días en los que era difícil encontrar personas con experiencia significativa, ya que los nuevos sistemas recién se estaban lanzando. Pero, al igual que en aquel entonces, el cambio digital no es tan simple como presionar un interruptor. Estas nuevas plataformas pueden requerir un conjunto completamente nuevo de habilidades para implementar, administrar y brindar soporte. Además, aquellos que están mejor preparados para guiar a los clientes de estos gigantes del ERP están abandonando la empresa. Tomemos como ejemplo a SAP, que este año anunció que despediría a aproximadamente 4,400 empleados, y Australia y Nueva Zelanda se encuentran entre las regiones afectadas. Según los comentarios recientes del CEO de SAP, Bill McDermott, los despidos forman parte de un “programa de ajuste”: “Lo que estamos haciendo con el programa de ajuste es dar a las personas la oportunidad de jubilarse anticipadamente en los países donde necesitamos hacerlo”, dijo McDermott. Una forma de ver las jubilaciones anticipadas es que la experiencia está a punto de abandonar la empresa antes de tiempo y, con ella, también se irá el conocimiento y la experiencia más confiable necesarios para facilitar la transición de los clientes. La forma en que estos clientes hacen negocios actualmente significa que podrían enfrentarse a un plazo de obsolescencia, pero aquellos que realicen la transición temprano podrían descubrir que las habilidades necesarias aún no están disponibles para brindar soporte en la transición a las plataformas digitales.
En resumen, la transición a plataformas digitales en el mundo empresarial presenta un desafío significativo. Los proveedores de ERP están impulsando a sus clientes a realizar el cambio, pero esto puede resultar en una demanda más que en una elección. Además, la implementación y el soporte de estas nuevas plataformas requieren habilidades especializadas que pueden no estar fácilmente disponibles. A medida que los expertos con experiencia se jubilan anticipadamente, se pierde un valioso conocimiento que podría facilitar la transición. Aquellos que decidan realizar la transición temprano deben estar preparados para enfrentar desafíos adicionales debido a la falta de experiencia en el mercado. Sin embargo, aquellos que logren superar estos obstáculos y adaptarse a las plataformas digitales estarán mejor posicionados para el éxito en el mundo empresarial en constante evolución.
