El término “analytics” tiene sus raíces en la antigua palabra griega que significa “descomponer” o “liberar”, y originalmente se utilizaba para indicar la transformación de algo complejo en algo simple que todos pudieran entender. Con eso en mente, resulta curioso que el análisis en sí mismo sea ahora ampliamente considerado como complejo, difícil y algo que es mejor dejar en manos de expertos. Sin embargo, cuando se desglosa en sus diversas prácticas, el análisis es mucho más accesible y ciertamente algo que casi cualquier persona podría manejar.
En esta serie, vamos a cubrir cuatro de los enfoques analíticos más utilizados y proporcionar detalles sobre lo que los distingue, en qué circunstancias se deben utilizar y cómo los especialistas en marketing pueden utilizar cada uno de ellos de manera más efectiva. Una vez que los especialistas en marketing puedan distinguir los diferentes tipos de análisis y sepan cómo utilizarlos mejor, esperamos que adquieran la confianza de que realmente entienden el “análisis”.
Para comenzar, vamos a ver una descripción general del análisis descriptivo. Pero antes de empezar, nos gustaría informarles que Econsultancy está llevando a cabo una sesión avanzada de dominio del análisis en Singapur el martes 15 de agosto. Haz clic aquí para ver más detalles y reservar tu lugar.
Entonces, ¿qué es el “análisis”? Antes de describir un tipo de análisis, es mejor definir exactamente a qué nos referimos con el término. En primer lugar, el análisis es la práctica de convertir datos e información existentes en nuevos datos e información que pueden respaldar la toma de decisiones. El análisis convierte los datos en información accionable. Es decir, cuando has “hecho análisis”, deberías tener datos más fáciles de leer que los que tenías anteriormente y que ayuden a las personas a tomar mejores decisiones. Además, el análisis es un proceso que implica una serie de pasos, que incluyen: adquirir datos, aplicar conocimientos del dominio, realizar funciones matemáticas en los datos, utilizar estadísticas cuando sea apropiado y presentar los resultados en un formato fácil de entender. Por último, el análisis es una disciplina que abarca las áreas de tecnología de la información, inteligencia empresarial y marketing, así como a los tomadores de decisiones ejecutivos. Por lo tanto, aprender las mejores prácticas para procesar y presentar datos es una habilidad útil para casi cualquier persona.
Descripción general del análisis descriptivo
En esta publicación, comenzaremos con un tipo de análisis que probablemente sea el más simple de todos, el análisis descriptivo. El análisis descriptivo tiene como objetivo resaltar las características y propiedades de un conjunto de datos utilizando un resumen. Se utiliza típicamente para convertir una gran cantidad de datos en una pequeña cantidad de información que es más fácil de entender.
Un ejemplo de esto sería una empresa que vende automóviles y que tiene una larga lista de todos los automóviles vendidos en un año. Esa lista es demasiado difícil de utilizar para la toma de decisiones, por lo que un analista resumiría los datos utilizando el análisis descriptivo. El informe resultante podría incluir el número de automóviles vendidos cada mes, un promedio de cuántos automóviles se vendieron por día o simplemente la suma de automóviles vendidos en un año. Todas estas cifras describen los datos en términos más simples que la lista en su totalidad. Debido a que es más fácil de digerir un resumen que una lista, el informe descriptivo será más adecuado para aquellos que intentan comprender lo que sucedió y decidir qué hacer en el futuro.
En resumen, el análisis descriptivo es una herramienta valiosa para convertir datos complejos en información accesible y comprensible. A través de este tipo de análisis, las empresas pueden obtener una visión clara de los datos y utilizarla para tomar decisiones informadas y estratégicas. En los próximos artículos, exploraremos otros tipos de análisis y cómo se pueden aplicar de manera efectiva en el campo del marketing.