En la actualidad, es difícil encontrar una empresa que no tenga algún tipo de sistema ERP híbrido (en la nube y en las instalaciones). En la mayoría de los casos, esto sucedió por accidente. Alguien en la organización evitó al departamento de TI y compró un servicio en la nube para satisfacer una necesidad de manera más rápida que con una solución en las instalaciones. Salesforce.com, por ejemplo, a menudo ha sido el comienzo del camino hacia un entorno híbrido para muchas empresas.
Las aplicaciones en la nube pueden ser soluciones relativamente fáciles y de bajo costo, pero introducen nuevas complejidades cuando necesitan integrarse con sistemas ERP y bases de datos en las instalaciones, o entre sí. Asegurarse de que los sistemas en la nube y en las instalaciones funcionen correctamente juntos es solo una parte del desafío híbrido. La otra parte es tomar las decisiones correctas sobre qué estará en la nube y qué se mantendrá en las instalaciones.
Para enfrentar estos desafíos, las organizaciones están pasando de un enfoque ad hoc para construir un sistema ERP híbrido a un proceso de planificación más estratégico. Este proceso incluye las mejores prácticas para evaluar, conectar, implementar y probar soluciones.
El crecimiento de la nube en las empresas ha llevado a que los departamentos de TI se vean involucrados en un papel de soporte inesperado. Antes, las áreas de negocio compraban aplicaciones en la nube sin la intervención de TI y pronto se encontraban con problemas relacionados con el volumen de transacciones y la integración con el sistema ERP central. Esto llevó a que TI tuviera que esforzarse para conectar las soluciones en la nube con los sistemas centrales de manera segura y confiable. Aunque los proveedores de soluciones en la nube se encargan de las actualizaciones, los departamentos de TI aún necesitan asegurarse de que esas soluciones actualizadas funcionen correctamente tanto con las aplicaciones en las instalaciones como con otras aplicaciones en la nube. “Cuanto más frecuentes sean las actualizaciones, más frecuentes serán las pruebas requeridas”, afirma Mike Guay, director de investigación de aplicaciones empresariales y ERP en Gartner.
En resumen, la integración de sistemas ERP en la nube y en las instalaciones presenta desafíos que las organizaciones deben abordar de manera estratégica. Es importante evaluar cuidadosamente las soluciones en la nube antes de implementarlas, asegurarse de que se puedan integrar de manera segura y confiable con los sistemas existentes y realizar pruebas frecuentes para garantizar un funcionamiento adecuado. Al adoptar un enfoque planificado y estratégico, las empresas pueden aprovechar al máximo los beneficios de la nube sin comprometer la integridad de sus sistemas ERP.
Fuente del artículo: NetworkWorld