La pandemia de coronavirus ha tenido un impacto devastador en la industria minorista, con muchas tiendas físicas cerradas y las ventas en línea disminuyendo. Sin embargo, hay esperanza para los minoristas que están dispuestos a adaptarse y utilizar la tecnología para mantenerse cerca de sus clientes y recuperarse de esta crisis.
Una de las formas en que la tecnología puede ayudar a los minoristas es a través de la realidad aumentada (AR) y la realidad virtual (VR). Estas soluciones permiten a los clientes experimentar productos de manera virtual, lo que puede aumentar las tasas de conversión en las compras en línea. Empresas como Vntana están utilizando la AR para crear versiones virtuales de productos, lo que permite a los clientes “probarse” los artículos en su hogar. Incluso antes de la pandemia, se observó un aumento en las tasas de conversión cuando los clientes podían colocar productos virtualmente en su hogar. Por ejemplo, Ikea experimentó un aumento del 30 por ciento en sus ingresos cuando implementó esta tecnología. Según un estudio de Artillery Intelligence, el 45 por ciento de los consumidores están interesados en probar la compra en AR y VR, y el 30 por ciento afirmó que nunca más querrían ir a una tienda física si la tecnología les proporciona suficiente información para tomar una decisión de compra. La adopción de la AR y la VR se espera que se acelere debido a la crisis del coronavirus, y las empresas que se adapten rápidamente estarán mejor posicionadas para sobrevivir y crecer en el futuro.
Otra forma en que la tecnología puede ayudar a los minoristas es a través del comercio electrónico hiperlocal. Empresas como Radius8 están utilizando la tecnología para mejorar las interacciones de compra en línea al proporcionar experiencias personalizadas y basadas en la ubicación del cliente. Esto permite a los minoristas ofrecer promociones y ofertas específicas para cada ubicación, lo que puede aumentar la participación de los clientes y las ventas. La tecnología hiperlocal también puede ayudar a los minoristas físicos al permitirles ofrecer servicios de entrega rápida y conveniente a sus clientes locales.
En resumen, la tecnología puede ser una herramienta poderosa para ayudar a los minoristas a sobrevivir y recuperarse de la crisis actual. La realidad aumentada y la realidad virtual pueden mejorar las tasas de conversión en las compras en línea, mientras que el comercio electrónico hiperlocal puede impulsar las ventas en las tiendas físicas. Los minoristas que adopten rápidamente estas tecnologías estarán mejor preparados para enfrentar los desafíos actuales y futuros.
