La transformación digital se ha convertido en un requisito fundamental para que las empresas prosperen, y la nube es un facilitador clave para lograrlo, ofreciendo escalabilidad, reducción de costos y sentando las bases para la innovación. Sin embargo, la complejidad que conlleva migrar a la nube significa que la realidad no cumple con las expectativas de muchos, según un informe reciente de Accenture.
Aunque el 77 por ciento de las empresas tienen al menos una aplicación o una parte de su infraestructura informática en la nube, solo un tercio de estas compañías han logrado los resultados esperados. Esta brecha entre la adopción y la satisfacción indica que muchos se encuentran con dificultades en la etapa de implementación. Si bien las empresas están adoptando nuevas tecnologías cada vez más rápido, muchas luchan por comprender y planificar adecuadamente las barreras que pueden enfrentar en el camino.
Cualquier cambio que involucre procesos, personas y su relación con la tecnología seguramente será todo menos sencillo, y la migración a la nube no es una excepción. Entonces, ¿por dónde deben comenzar las empresas cuando se trata de gestionar esta brecha y finalmente hacer realidad la promesa de los servicios en la nube?
1. Alinear a todas las partes interesadas desde el principio
La complejidad del cambio empresarial y organizativo es una de las principales barreras para el éxito en la nube: el 55 por ciento de los encuestados por Accenture identificaron esto como una razón por la cual no han logrado los resultados esperados. Un estudio encargado por Rackspace reflejó este hallazgo, con un tercio de los encuestados diciendo que la falta de alineación entre el negocio y la tecnología afectó su proceso de migración.
Para que las migraciones a la nube sean exitosas, es imperativo que las empresas presten atención a gestionar la brecha entre las expectativas y la realidad desde el principio. Esto significa comenzar con una perspectiva precisa sobre su mentalidad, madurez y capacidad. Los equipos de negocios y TI también deben trabajar juntos desde el principio para ofrecer programas de migración exitosos, centrándose en una comunicación sólida e identificación de los recursos y habilidades adecuados en toda la empresa, junto con una planificación rigurosa, construcción y pruebas.
2. Gestionar el riesgo de seguridad y cumplimiento normativo
La investigación de Rackspace encontró que la seguridad y el cumplimiento normativo de la privacidad eran las principales preocupaciones de las organizaciones con respecto a su infraestructura en la nube (76 por ciento y 51 por ciento de los encuestados). Perder el control operativo de los datos crea vulnerabilidad a amenazas externas de seguridad y privacidad, mientras que el GDPR y otras regulaciones de gestión de datos han establecido mayores sanciones por el robo, mal uso y abuso de los datos de los clientes.
Las empresas pueden equilibrar la migración a una infraestructura en la nube asegurando que los activos estén protegidos mediante la comprensión proactiva del panorama de amenazas en constante evolución, desarrollando una estrategia de seguridad en la nube dedicada desde el principio y contratando socios para ayudar a implementar o fortalecer la seguridad de la red. Además de la protección contra amenazas, también deben implementar una detección y remediación rápida de brechas para minimizar el tiempo que los ciberdelincuentes pueden pasar en el entorno y el daño que pueden causar.
3. Cerrar la brecha de habilidades
Casi la mitad de las organizaciones (47 por ciento) encuestadas por Rackspace dijeron que solo se dieron cuenta de que carecían de las habilidades necesarias en la nube durante la migración. Se necesita experiencia especializada en todo el proceso de arquitectura, seguridad y gestión de la migración. Sin embargo, con demasiada frecuencia, la realización de que esto falta ocurre una vez que el proyecto ya ha comenzado, lo que significa que las empresas no pueden acelerar el valor de la nube, algo que un tercero especializado y de confianza puede proporcionar. Esto no solo aumenta el tiempo de valor de los programas en la nube, sino que también puede afectar la experiencia del usuario final, interrumpir las operaciones comerciales y causar daños financieros.
En resumen, para cerrar la brecha entre las expectativas y la realidad de la migración a la nube, las empresas deben alinear a todas las partes interesadas desde el principio, gestionar el riesgo de seguridad y cumplimiento normativo, y cerrar la brecha de habilidades mediante la búsqueda de expertos en la nube. Solo así podrán aprovechar al máximo los beneficios de la nube y lograr una transformación digital exitosa.
Fuente del artículo: TechRadar