En el mundo de los negocios, es fundamental reconocer cuándo mantener un proyecto en marcha y cuándo cortar las pérdidas. La “Teoría del Caballo Muerto” ofrece una perspectiva valiosa al respecto, ilustrada por Oscar Berg. Esta teoría establece que, al descubrir que estás montando un caballo muerto, la mejor estrategia es bajarte. Pero, ¿qué significa esto en términos empresariales?

¿Qué es la “Teoría del Caballo Muerto”?

En el contexto empresarial, un “caballo muerto” se refiere a un proyecto o empresa que ya no es viable, sin importar cuánto esfuerzo se le dedique. Esto puede ser consecuencia de cambios en el mercado, aumento de la competencia, o simplemente una ejecución deficiente. El resultado es el mismo: estás invirtiendo tiempo y recursos en algo con muy pocas probabilidades de éxito.

Ejemplos de Empresas que Han Intentado Montar un Caballo Muerto

Un claro ejemplo de una empresa que cayó presa de la Teoría del Caballo Muerto es Kodak. En su momento, Kodak dominaba el mercado de la fotografía en película, pero al llegar la era de la fotografía digital, la compañía no supo adaptarse. Kodak siguió invirtiendo en su negocio de películas, incluso cuando estaba claro que el mercado estaba migrando hacia lo digital.

Otro caso conocido es el de Blockbuster, la antigua gigante del alquiler de videos. Blockbuster fue lenta en adaptarse al auge de los servicios de streaming y alquiler de películas en línea. Continuaron invirtiendo en sus tiendas físicas, a pesar de que sus clientes se alejaban de los medios físicos. Esta incapacidad de reconocer el cambio en el mercado y pivotar hacia un nuevo modelo de negocio llevó a su caída.

Sin embargo, no todos los “caballos muertos” resultan en empresas completamente en quiebra. Una sola unidad de negocio, departamento, línea de productos o inversión que está perdiendo dinero y recursos también puede considerarse un “caballo muerto”. Un ejemplo de esto es Amazon Echo.

Cómo Evitar Montar un Caballo Muerto

Estos ejemplos demuestran que incluso las empresas más exitosas pueden caer víctimas de la Teoría del Caballo Muerto. Entonces, ¿qué pueden hacer los dueños de pequeñas empresas y ejecutivos para evitar caer en esta trampa?

La clave está en “siempre estar experimentando”. Realizar mini-experimentos te ayudará a ajustar tu brújula y identificar en qué tendencias vale la pena invertir, cuáles ignorar y cuáles proyectos debes abandonar antes de que consuman el resto de tu negocio.

Al otorgar autonomía a tu equipo para experimentar (siguiendo algunas pautas), terminarás teniendo una empresa que realiza decenas o incluso cientos de mini-experimentos cada año. ¿Y si Blockbuster hubiera invertido en una cultura de experimentación reflexiva?

En Resumen

La Teoría del Caballo Muerto es un recordatorio poderoso de la importancia de ser proactivo en reconocer cuándo un proyecto o empresa ya no es viable. Al mantenerse al tanto de los cambios en el mercado, monitorear tus métricas, cortar tus pérdidas cuando sea necesario y estar dispuesto a cambiar tu visión, los dueños de pequeñas empresas y ejecutivos pueden evitar caer en la misma trampa en la que han caído muchas otras compañías antes que ellos.

Recuerda siempre estar atento a las señales que indican que estás montando un “caballo muerto” y toma decisiones valientes para seguir adelante y crecer en el mundo empresarial.

Source: Medium