Es ese momento del año nuevamente. Sí, las revisiones de desempeño o evaluaciones del rendimiento laboral están pendientes. ¿Cómo has hecho? Tu líder (o gerente) evaluará tu desempeño y comportamiento durante el último año para determinar si es necesario un aumento o una promoción. También confirmarán si tus servicios son significativos para la empresa en la que trabajas. ¿Cómo ocurre esta evaluación? Se pueden utilizar varios métodos, como la retroalimentación de 180 grados, para responder preguntas sobre la persona. La forma más común de evaluación del rendimiento es la perspectiva subjetiva.
La evaluación es una opinión, un punto de vista o una experiencia. La ilusión es que la revisión es justa e imparcial, pero eso es imposible. La naturaleza humana no permite imparcialidad al evaluar a alguien. Por ejemplo, las emociones y los prejuicios inconscientes bloquean la capacidad de negar el favoritismo. Si alguien se desempeña bien en su rol y ha ganado la confianza de su líder, el desempeño estará a su favor. Este individuo probablemente sobresaldrá en su carrera debido al sesgo favorable atribuido a la revisión alentadora.
Algunas personas pueden ser vistas de manera diferente y, a su vez, recibir una evaluación desfavorable. Situaciones anteriores podrían haber causado la percepción de que esta persona causa conflictos y no puede abordar la percepción debido a la falta de conciencia; en cambio, se le hace responsable de ello. Las evaluaciones involucran sentimientos personales; como se mencionó anteriormente, la naturaleza humana lidera. Una perspectiva subjetiva es un hecho al evaluar el rendimiento o participar de alguna manera.
Nos gustan las personas, o no nos gustan. Si tienes simpatía por alguien, tu opinión sobre ellos será favorable. Si eres imparcial hacia alguien, tu opinión será desfavorable, incluso si han cumplido con todos los aspectos positivos y tienen un desempeño y comportamiento sobresalientes. No puedes evitarlo.
La mejor manera de recibir perspectivas y evaluaciones favorables es establecer contactos, mantener una buena relación con tu líder y ser alguien conocido por ser razonable. Aunque se supone que una revisión debe ser imparcial y justa, no lo es. Tu departamento de recursos humanos afirma que las evaluaciones son honestas, lo que implica el trabajo asignado a tu rol. Algunas revisiones pueden ser imparciales porque se evalúa información tangible. Sin embargo, el resto del desempeño se basa en la retroalimentación de otros y la de tu líder.
Además, está el comportamiento que se evalúa. Puedes estar en desacuerdo con una persona, lo que puede cambiar todo de manera negativa. Hubo una situación en la que una persona no cumplió con una solicitud de un líder en su organización. El líder quería poner a la persona en período de prueba, lo que podría llevar a la pérdida del trabajo. Su recomendación se basó en una perspectiva subjetiva, no en nada más. Afortunadamente, otros determinaron que la persona podría necesitar orientación, pero no se justificaba un período de prueba.
Es importante tener en cuenta que la forma en que una situación debería desarrollarse suele ser lo contrario. Finalmente, la perspectiva subjetiva es omnipresente entre los seres humanos. Piensa en una vez en la que tuviste que ofrecer una opinión sobre alguien. ¿Fue imparcial y se basó en evidencia tangible, o involucró tu percepción basada en una experiencia previa? Sé honesto y determina si has sido justo o si la evaluación es una perspectiva subjetiva. Aprende más sobre tus opiniones y prejuicios conscientes e inconscientes para determinar cuán personal es tu postura.
Source: Medium