El amor es un sentimiento que solemos asociar con nuestras relaciones personales, como la pareja, la familia y los amigos. Sin embargo, ¿alguna vez has considerado el papel que el amor puede desempeñar en el mundo de los negocios?
Detrás de cada acción, plan y decisión empresarial, se encuentran una serie de sentimientos no racionales que realmente guían nuestras conductas. Y el amor es uno de los más importantes. ¿Por qué? Porque amar a alguien implica estar dispuesto a dar generosamente y tener conversaciones difíciles que son necesarias para seguir construyendo una relación.
En un mundo donde la mayoría de nosotros pasamos la mayor parte de nuestro tiempo en el trabajo, la importancia de cultivar relaciones basadas en el amor no puede ser subestimada. Invertir en las personas, más que en los beneficios, es lo que constituye un “buen negocio”. Significa comprometerse desde el corazón, no solo desde la cabeza.
Las Empresas B Certificadas, con su filosofía de triple impacto, entienden intuitivamente esto. Se está construyendo una nueva economía de impacto, donde las empresas priorizan y consideran su impacto en todas las partes interesadas, incluyendo comunidades, trabajadores, clientes y el medio ambiente.
Aunque aceptemos el vital papel que juega el amor en los negocios, todos sabemos que amar puede ser difícil. Es mucho más complicado que los números en una hoja de balances. Entonces, ¿cómo podemos desarrollar nuestras habilidades amorosas en el ámbito empresarial? ¿Cómo podemos comprometernos significativamente desde el corazón mientras navegamos en planes estratégicos y márgenes de beneficio?
Las cinco habilidades “desde el corazón” en las que nos enfocamos en mi empresa, B Corp PixelSpoke, este año son las siguientes:
- Crecer nuestras cuentas emocionales con los demás: al igual que en una cuenta bancaria real, necesitas depositar más de lo que retiras para mantener la salud emocional.
- Tomarse el tiempo para escuchar y reflexionar: se trata de escuchar para comprender en lugar de buscar acuerdo.
- Reconocer las emociones: aunque nos guste creer que somos criaturas racionales, la realidad es que llevamos nuestras emociones a todo lo que hacemos.
- Comprender las necesidades: identificar las necesidades, especialmente en momentos de conflicto, puede ayudarnos a buscar pasos constructivos.
- Hacer peticiones positivas: enfocarse en pedir lo que realmente se quiere, en lugar de centrarse en lo que no se quiere.
El amor en los negocios no significa que todo salga perfecto. A lo largo de nuestra vida laboral, es probable que cometamos errores y digamos cosas inapropiadas. Sin embargo, con una cuenta emocional saludable y las herramientas para comprometerse de manera significativa, podemos evitar causar sufrimiento y daño a largo plazo en el ánimo del equipo. El amor implica estar comprometidos con hacer el trabajo duro y necesario para cultivar relaciones sólidas y conexiones más profundas.
En resumen, el amor puede ser un motor poderoso para el éxito empresarial. Invertir en las relaciones humanas, practicar la empatía y la comprensión, y comprometerse desde el corazón puede no solo mejorar el clima laboral y la satisfacción de los empleados, sino también impulsar el rendimiento y la rentabilidad de la empresa a niveles insospechados.
Source: Medium