El concepto de Producto Mínimo Viable (MVP) es fundamental en el desarrollo de nuevos productos. A menudo, se tiene una idea errónea de que un MVP consiste en construir versiones más pequeñas, más baratas o limitadas de un producto, sin embargo, esto no es correcto. Un MVP se trata de aprender de tus clientes y probar tus suposiciones antes de siquiera comenzar a construir tu producto.

¿Qué es un MVP?

Steve Blank, un emprendedor en serie y considerado el padre del movimiento Lean Startup, explica que la importancia de un MVP no es necesariamente crear una “versión más barata de tu producto”, sino probar de la forma más simple posible si tienes un producto que le importa a los clientes, y descubrir si tiene potencial comercial. Blank enfatiza que la principal ventaja de un MVP es aprender de tus clientes y probar tus propias suposiciones, sin tener que gastar mucho dinero o tiempo construyendo algo que los usuarios no quieran o necesiten.

De acuerdo con Blank, un MVP no implica construir la primera versión, o una versión más barata de tu producto, sino aprender tanto como sea posible de tus clientes: sus deseos, necesidades y puntos de dolor. Esto te servirá como guía en el proceso de construcción.

Diferencias clave entre un Prototipo y un MVP

Prototipo: Es una prueba de concepto que es funcional, pero no está listo para lanzarse al mercado. Su propósito es determinar la viabilidad de un producto o idea y demostrar a otros que estás comprometido a construirlo en un futuro próximo.

MVP: Es más que una prueba de concepto, es la primera versión de tu producto con algunas características clave que se probarán. Su propósito radica en probar tu producto y ponerlo en manos de tus clientes/usuarios para recopilar la mayor cantidad de comentarios posible.

¿Cuál viene primero y por qué?

Un prototipo suele ser el paso inicial, ya que permite obtener validación de tu idea/concepto antes de invertir recursos en la construcción de un producto real que los usuarios podrían no valorar. Es esencial entender la diferencia entre un MVP y un prototipo para el éxito de tu proyecto.

En resumen, un MVP se centra en presentar tu propuesta de valor a los usuarios, demostrando cómo tu idea puede ser sostenible a nivel comercial, y se concibe como una fase de aprendizaje. Los prototipos, por otro lado, se construyen rápidamente y están destinados a grupos más reducidos, atravesando varias progresiones e iteraciones.

Comprender la importancia y el propósito de un Producto Mínimo Viable te permitirá desarrollar productos más sólidos y alineados con las necesidades reales de tus clientes. Además, saber diferenciar entre un MVP y un prototipo te ayudará a tomar decisiones más informadas en el proceso de desarrollo de productos. ¡No subestimes el poder de un MVP bien construido!

Source: Medium