Cuando se escuchan las palabras ‘modales’ y ‘etiqueta’, a menudo se nos vienen a la mente imágenes de la vida durante el reinado de la Reina Victoria. Sin embargo, la etiqueta no se trata solo de normas anticuadas, sino que sigue siendo uno de los pilares del éxito tanto en la vida estudiantil como en el ámbito laboral.

En el mundo competitivo de hoy, la etiqueta empresarial puede proporcionar una ventaja significativa a aquellos que la practican. A continuación, se presentan algunas pautas clave que pueden marcar la diferencia en el entorno laboral:

  1. Puntualidad: Como dice el refrán, “si llegas temprano, estás a tiempo… si llegas a tiempo, estás tarde… y si llegas tarde, ni siquiera te molestes en aparecer”. El tiempo es nuestro recurso más valioso. Llegar unos minutos antes demuestra a la dirección que te tomas en serio tu rol. Aprovecha ese tiempo para prepararte para el día laboral.
  2. Comunicación oportuna: Responder a llamadas y correos electrónicos de manera oportuna es esencial en cualquier entorno laboral. Si no puedes abordar una consulta de inmediato, avisa a la persona interesada mediante una nota cortés o una llamada rápida. Este gesto se percibe como una medida proactiva para abordar sus preocupaciones.
  3. Palabras de cortesía: Expresiones simples como “por favor”, “gracias” y “se aprecia mucho” tienen un gran impacto en el lugar de trabajo. La cortesía es un arte que debemos mostrar en todo momento.
  4. Respeto a todos los empleados: En el ámbito laboral, es fundamental tratar a todos con respeto, independientemente de su posición. Todos estamos conectados de alguna manera y nunca sabemos quién podría ascender en la organización. Además, siempre hay alguien observando.
  5. Escucha activa: Ser un buen oyente es importante tanto en lo personal como en lo profesional. Cuando alguien está hablando, es crucial prestarle atención y mostrarle el respeto que se merece. La constante distracción de dispositivos electrónicos puede ser muy perjudicial en este sentido.
  6. Culturas corporativas: Aprovechar los recursos y la formación disponibles sobre la cultura de la empresa, especialmente si esta tiene presencia internacional, puede ser una excelente manera de mostrar interés y compromiso con tu trabajo.
  7. Etiqueta en los correos electrónicos: Evita el uso excesivo de emoticonos, abreviaturas o mayúsculas en los correos profesionales, ya que pueden afectar la seriedad del mensaje. Es importante mantener un tono adecuado en todas las comunicaciones escritas.
  8. Evitar chismes: Los chismes son destructivos y pueden dañar las relaciones y la cultura de la empresa. Mantente alejado de conversaciones negativas que no aportan valor a tu trabajo.
  9. Enfoque en lo positivo: Aunque todos tenemos malos días, es importante centrarse en los aspectos positivos del trabajo y recordar la suerte que es tener un empleo. Las actitudes negativas pueden tener un impacto contagioso en el entorno laboral.
  10. Higiene personal: Cuidar la higiene personal es fundamental en un entorno de oficina. Evita el uso excesivo de perfumes y asegúrate de mantener un buen aspecto para no incomodar a tus compañeros de trabajo.

En resumen, seguir estas pautas de etiqueta empresarial puede no solo mejorar tu imagen profesional sino también contribuir a un ambiente laboral más positivo y productivo en general.

Source: Medium