Golpea primero para abrir la puerta. Muchos de nosotros tenemos miedo. Tenemos estos GRANDES y salvajes sueños. Sin embargo, para alcanzar nuestras metas elevadas, necesitaremos la ayuda de otras personas, su amor, tiempo, dinero, recursos y red de contactos para llegar allí. La idea de ser un “millonario autodidacta” es pura tontería. Nadie llega a la cima por sí solo. Ciertamente nunca llegarás a la cima si no eres lo suficientemente valiente para golpear primero y abrir la puerta. No puedes tener éxito al más alto nivel de tu oficio si tienes demasiado miedo de hacer la llamada, enviar el correo electrónico, deslizarte en los mensajes directos de alguien, conectar en LinkedIn o Twitter; o escribir a la persona que te ayudaría a dar el siguiente paso hacia tus objetivos.

¿Por qué, como personas, nos paralizamos tanto al hacer la tarea exacta que necesitamos hacer para avanzar? ¿Vas a seguir escondido? ¿Optar por jugar en pequeño? ¿Hablar mucho con tus labios, pero no dar suficientes pasos en la calle? Es decir, ¿vas a elegir no respaldar tus palabras con acciones? La solución es simplemente esta: Golpear primero para abrir la puerta. Alguien no puede abrir la puerta y darte una oportunidad o una posibilidad si no te oyen golpear. Nadie te debe nada. Ciertamente no van a poder leerte la mente y presentarte oportunidades en bandeja de plata. Debes golpear primero para abrir la puerta. Porque si eliges enviar ese correo electrónico, escribir esa carta, solicitar ese trabajo, invitar a salir a esa chica o escribirle a esa persona, lo peor que puede pasar es que te respondan con un ‘no’. Eso es todo.

¿Cuál es el lado positivo de golpear a la puerta de la oportunidad? Hay tanto potencial, incluyendo: un nuevo trabajo, una nueva cita o relación, una nueva oportunidad, un nuevo amigo, un nuevo socio comercial, una nueva venta, una nueva conexión, una nueva experiencia de aprendizaje, un nuevo camino. Así que ¡golpea primero, sonríe cuando abran la puerta y simplemente inténtalo!

Source: Medium