Recientemente descubrí el Mapa de nuestros Egos. La información que compartiré contigo será útil para comprender cómo funciona tu ego y lo que constantemente desea de ti. Guerras, disputas, divorcios, miserias, dolor y depresión tienen algo en común. Ese algo se llama nuestro ego. Cada persona es feliz o triste en relación al ego que lleva consigo. Cada persona tiene un ego específico que se le otorga según su fecha de nacimiento. En total, tenemos un conjunto de 9 egos diferentes. Escribo esta publicación para compartir el mapa de nuestros egos.

Sufrimos porque siempre queremos y esperamos ciertas cosas. Cada persona quiere y espera de manera diferente. Vivimos en una crisis cuando conocemos a personas que aplastan nuestras expectativas y deseos. La parte divertida es que necesitamos a estas personas para tener una crisis, porque es la única forma de reiniciar nuestra mente y cuerpo.

¿Cómo funciona este mapa? Naciste en un día específico del mes. Esta fecha es el número de tu ego. El número de ego quiere y espera solo lo que ese número demanda. Veamos la lista para nosotros mismos:

Estos egos tienen características y patrones específicos que influyen en cómo percibimos el mundo y nos relacionamos con los demás. Es importante comprender que cada uno de nosotros tiene una forma única de ser y de interactuar con nuestro entorno.

Cada ego tiene su lado positivo y su lado negativo, y es fundamental aprender a equilibrar esas características para lograr un crecimiento personal y una convivencia armoniosa en sociedad. Reconocer nuestras propias tendencias egoístas y las de los demás nos permite desarrollar una mayor empatía y comprensión hacia los demás.

Al conocer los diferentes tipos de egos y sus inclinaciones naturales, podemos trabajar en nuestras áreas de mejora personal y en la manera en que nos relacionamos con los demás. Aceptar que todos tenemos necesidades y perspectivas distintas nos ayuda a cultivar relaciones más saludables y a evitar conflictos innecesarios.

En última instancia, el Mapa de los Egos nos invita a reflexionar sobre nuestra propia personalidad y a valorar la diversidad de formas de ser que existen en el mundo. Al comprender y apreciar las diferencias entre nosotros, podemos avanzar hacia un mayor entendimiento y cooperación en nuestra vida diaria.

Que todos podamos encontrar la paz eterna al aceptarnos y respetarnos mutuamente, reconociendo que cada ego tiene un papel importante en la complejidad de la experiencia humana.

Source: Medium