Recientemente se ha estado debatiendo si la Edad de Oro del software como servicio (SaaS) ha finalizado para los inversores. En un mundo donde gigantes como SalesForce, Google y Microsoft dominan el mercado, adquirir nuevas empresas emergentes se ha vuelto una práctica común, lo que plantea la duda de si aún existen oportunidades en este sector para los inversores.
Un análisis del índice BVP Cloud y las 43 empresas públicas valoradas en más de mil millones de dólares revela que la mayoría de los unicornios actuales fueron fundados entre 2003 y 2008. Empresas como Tableau, Shopify, Box, Workday, Hubspot, entre otras, surgieron durante este período, lo que algunos consideran la “Edad de Oro” para los inversores iniciales en SaaS.
Si bien la fundación de nuevas empresas públicas en SaaS ha disminuido desde 2008, el promedio de 9.5 años para que una empresa de SaaS salga a bolsa sugiere que es probable que surjan más empresas con valor de mil millones de dólares en los próximos años. Ejemplos como Nutanix, Purestorage, Stripe, Snowflake Computing y Slack, fundados después de 2008, demuestran que la tendencia de los unicornios en SaaS podría continuar en el futuro cercano.
Si bien la competencia en el mercado se ha intensificado, especialmente con la saturación en varias categorías de software, la innovación en sectores no dominados por incumbentes de SaaS, como el diseño, la comunicación empresarial y la tecnología descentralizada, promete nuevas oportunidades para los inversores.
En resumen, aunque el panorama de las inversiones en SaaS ha evolucionado y se ha vuelto más desafiante, el potencial de crecimiento y la creación de empresas significativas aún existen, especialmente en áreas no tradicionales de SaaS. La “Edad de Oro” para los inversores en etapas tempranas podría no haber llegado a su fin, sino haberse transformado en un nuevo paradigma más competitivo y diversificado.
En definitiva, el sector de SaaS continúa evolucionando y ofreciendo oportunidades para aquellos dispuestos a adentrarse en un mercado en constante cambio.
Source: Medium