Ya sea que estés tratando con clientes individuales o empresas, al final necesitas llegar a un tomador de decisiones que se encuentra al otro lado de la pantalla. No importa si la persona está allí en su propio nombre o detrás de una identidad corporativa; tu trabajo es destacar entre todos los demás mensajes con los que se bombardea a diario. La clave radica en tratarlos no como clientes o consumidores, sino como seres humanos.

Existe la teoría de Bryan Kramer que afirma que “b2b o b2c ya no existen, solo hay humanos hablando con humanos” (o h2h). Esta idea de poner a los humanos y su experiencia en el centro de todo lo que se hace empresarialmente es fundamental.

¿Qué significa realmente la experiencia humana? Va más allá de simplemente analizar el comportamiento de los clientes en un solo punto de contacto. Debemos reconocer a los clientes como seres humanos, con emociones, libre albedrío y comportamientos individuales.

La autenticidad y la honestidad con nuestros clientes son aspectos clave para establecer conexiones significativas. Es posible que haya cierta resistencia a este enfoque si la prioridad principal es aumentar los márgenes de beneficio.

Una herramienta útil para comprender a nuestros clientes es la creación de personas. Visualizar a un cliente “real” de esta manera puede ayudar a conocerlos mejor, incluyendo información sobre sus preferencias, cómo les gustaría ser tratados y cuáles son sus necesidades.

A pesar de que muchos han reconocido la importancia de la experiencia humana, aún no le damos el reconocimiento que merece. Es vital construir una comunidad alrededor de las marcas para crear una experiencia positiva para el cliente. Todos deseamos pertenecer y conectarnos con personas (¡y marcas!) que comparten nuestros valores, intereses o necesidades.

En un mundo donde la automatización y la simplificación son cada vez más comunes, la autenticidad y la empatía, tanto a nivel personal como empresarial, nunca pasan de moda.

El Factor Humano en Cloud Development

En Cloud Development, cada miembro del equipo se reconoce mutuamente como ser humano, desde los títulos laborales hasta el trato diario. Se fomenta la contribución de todos los integrantes en diversas áreas de la empresa, promoviendo así un ambiente de colaboración y conexión auténtica.

Al final, recordemos que, a pesar de la tecnología y la digitalización, la esencia de las relaciones comerciales y personales sigue siendo la misma: la conexión humana. Mantener esa humanidad en nuestros negocios nos permite construir relaciones sólidas y duraderas con nuestros clientes, basadas en la confianza y la empatía.

En resumen, la clave para destacar en el mundo empresarial actual radica en tratar a las personas como lo que son: humanos. Esta filosofía no solo mejora la experiencia del cliente, sino que también enriquece nuestras interacciones diarias, tanto dentro como fuera de la empresa.

Al final del día, recuerda: somos humanos, trabajando para y con otros humanos.

Source: Medium